Una interna de la cárcel de Mas d'Enric intenta asfixiar a una funcionaria leridana

Una funcionaria leridana del centro penitenciario de Mas d’Enric, en Tarragona, resultó brutalmente agredida el domingo cuando una reclusa intentó asfixiarla y le arrancó varios mechones de pelo al tratar de evitar la víctima que la agresora se peleara con otra interna, según denunciaron desde el sindicato CSIF. 

La conselleria de Justicia rechazó que se tratara de un intento de homicidio, como señaló el sindicato, y dijo que no se produjo un intento de asfixia con el cordel, sino que durante la disputa la interna rompió una cinta que la funcionaria llevaba en el cuello.

Según fuentes penitenciarias, los hechos tuvieron lugar a las 11.45 horas en el módulo de Mujeres cuando la funcionaria intentó impedir que una interna saliera al patio para agredir a otra presa. 

La reclusa se encaró a la trabajadora, originaria de Lleida, y le estiró de la cinta que esta última llevaba al cuello con una acreditación hasta que se rompió e intentó asfixiarla, según el parte interno del incidente. En ese momento, la presa se abalanzó sobre la funcionaria y le arrancó varios mechones de pelo. 

Las mismas fuentes señalaron que una segunda funcionaria y otras internas ayudaron a reducir a la agresora. Otras fuentes informaron de que la reclusa también profirió amenazas de muerte. La trabajadora herida fue atendida por los servicios médicos y continuó trabajando hasta finalizar el servicio. 

El sindicato CSIF denunció que la interna está catalogada como peligrosa. Los hechos también fueron denunciados por ACAIP. En un comunicado, el CSIF señaló como responsables a la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, y al secretario de Medidas Penales, Reinserción y Atención a la Víctima, Amand Calderó. Asimismo, propuso llevar a cabo concentraciones en todas las prisiones catalanas esta semana y ha convocado hoy una a las 12.00 horas a las puertas del Centre Penitenciari Ponent. 

Cabe recordar que en la cárcel de Mas d’Enric fue asesinada una cocinera, lo que provocó una crisis en las prisiones catalanas la pasada primavera. El pasado mes de mayo, un funcionario de la cárcel barcelonesa de Lledoners, vecino de la provincia de Lleida, resultó herido al ser brutalmente agredido por un interno. Al día siguiente, un funcionario de la cárcel de Lleida fue agredido por un recluso.