El Síndic de Greuges reclama de nuevo al ayuntamiento el expediente del restaurante La Boscana de Bellvís
La primera petición fue desatendida
El Síndic de Greuges ha reclamado por segunda vez al ayuntamiento de Bellvís la documentación relativa a las licencias urbanísticas y de actividad del restaurante La Boscana después de que el consistorio no atendiera la primera solicitud del ombusdman catalán.
La sindicatura mantiene abierto un expediente, tras haber presentado una queja una vecina, en el que trata de aclarar si ha sido correcta la actuación del ayuntamiento en este asunto. El consistorio autorizó en 2008 la apertura de una “actividad de ocio y educación en el tiempo libre” (el epígrafe de las casas de colonias y las granjas escuela) en la masía levantada sobre suelo no urbanizable en la que hoy opera el restaurante, que tiene una estrella Michelín, y que dos años después la amplió añadiendo un “servicio de restauración”.
El consistorio, cuyo actual equipo de gobierno ha encargado al secretario y al arquitecto municipales que dictaminen si esa licencia ampara o no el funcionamiento de un restaurante, recibió un primer requerimiento de información del Síndic en marzo, pero no le remitió la documentación que solicitaba.
La segunda petición de información tiene fecha del 4 de julio y el plazo para contestar sigue abierto.
La licencia del restaurante, en investigación
El ayuntamiento de Bellvís ha abierto, tras la denuncia de una vecina, un expediente urbanístico para determinar si la licencia con que cuenta La Boscana ampara la actividad del exitoso restaurante que dirige Joel Castanyé, que está reconocido con una estrella Michelín.
Pla d'Urgell
Investigan la licencia de un restaurante con una estrella Michelin de Bellvís tras una denuncia
EDUARDO BAYONA
Un portavoz de la empresa aseguró que “lo tenemos todo en regla. Tenemos todas las licencias. Siempre hemos hecho lo que se nos ha pedido”. La denuncia sostiene que el local, que presta servicio de restaurante y organiza banquetes y eventos, no tiene los papeles en regla para operar como tal y emite ruido en exceso.
Según consta en el expediente, La Boscana, cuyo recinto completo abarca cinco parcelas de un mismo polígono catastral ubicado en la zona sur del término de Bellvís, a algo más de un kilómetro del casco urbano, cuenta desde 2008 con una licencia ambiental de “centro de ocio y educación en el tiempo libre”, la misma que una casa de colonias o una granja escuela.
Esa licencia fue ampliada en 2010 para un servicio de restauración, un detalle nuclear para los dictámenes que deben elaborar el secretario y el arquitecto municipales: ¿ese permiso es el de un restaurante o el de la cocina y el comedor de una casa de colonias?El permiso inicial, de 2008, incluye la obligación de reciclar “residuos biodegradables de cocinas y restaurantes”, pero también los “excrementos de animales, orina y cieno (incluida paja podrida) y efluentes”, limita la emisión de ruido a una horquilla de 42 a 52 decibelios y obliga a cesar la actividad a medianoche “tal y como se define en el proyecto”.