MUNICIPIOS URBANISMO
Alfarràs condona a veinte vecinos y comercios la tasa de vado por obras
Por los inconvenientes que ha supuesto la reurbanización de la avenida Catalunya
El consistorio está abierto a reducir el IBI si los trabajos se alargan más de fijado
El ayuntamiento de Alfarràs ha perdonado las tasas de este año que se aplican a los vados a una veintena de vecinos, principalmente comercios, así como las que se cobran a las terrazas de los tres bares que hay en la avenida Catalunya por los perjuicios que les han causado las obras de reurbanización en esta vía principal de la población, según explicó el alcalde, Joan Carles Garcia. Asimismo, indicó que “estamos abiertos a estudiar otras rebajas en tasas como el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) si, finalmente, los trabajos se alargan más de lo establecido en el contrato “aunque, de momento, vamos sobre los plazos marcados por la empresa constructora”, indicó. Ayer comenzó la última fase de remodelación de esta zona donde también se ubica el ayuntamiento, con la colocación de baldosas y se prevé que en dos meses o tres puede quedar finalizada. Quedará pendiente todo lo relativo a ajardinamiento y revegetación que no se podrá hacer hasta entrado el otoño, remarcó Garcia.
Los comercios de la avenida Catalunya y la plaza Lluís Companys, en el centro urbano, protestaron a mediados de mayo por la importante reducción de ventas que ha provocado la reurbanización de esta zona. También se quejaron los vecinos por problemas de movilidad, sobre todo los de más edad, y el PSC, en la oposición, denunció la mala planificación y sobrecostes. Comenzaron a mediados de marzo y comportó el levantamiento de todo el pavimento, en muy mal estado. Garcia incidió en que han surgido imprevistos en la composición del subsuelo que obligaron a consolidarlo con hormigón antes de colocar el pavimento definitivo. Las lluvias de esos meses también constribuyeron a relantizar y demorar la actuación. Garcia explicó que el proyecto tiene un plazo de ejecución de 6 meses y una inversión de 714.000 euros que se pagarán con ayudas de la Generalitat destinadas a pacificar el tráfico del centro urbano. “Tenemos el compromiso de la empresa adjudicataria de que cumpliarán los plazos previstos para el grueso de la actuación”. La calle tendrá un solo nivel, suprimiendo aceras y renovando servicios básicos. Los coches podrá circular pero tendrán prioridad los peatones.