Incautadas más de 25.500 plantas de marihuana en ocho meses en Lleida

Los cuerpos policiales han incautado más de 25.500 plantas de marihuana en los diferentes operativos que han llevado a cabo en los primeros ocho meses del año en las comarcas leridanas. Un cultivo que no para de crecer y que busca nuevos métodos con plantaciones 'indoor' más sofisticadas, en zonas boscosas o incluso en un asador.

Que las comarcas leridanas se han convertido en uno de los huertos más importantes en Europa para el cultivo de marihuana no es ninguna novedad. Así lo demuestran año tras año las diferentes actuaciones policiales para poner coto a este tipo de delincuencia al alza y todo lo que conlleva, con más presencia de grupos criminales y el uso de armas. En los ocho primeros meses del año, los Mossos d’Esquadra, la Policía Local y la Guardia Civil han incautado más de 25.500 plantas de marihuana en diferentes intervenciones y superan las 60.000 en dos años. Una cifra que, a pesar de ser inferior a la del año pasado, se incrementará previsiblemente en septiembre, ya que es el mes en el que se suelen recoger este tipo de cultivos. Lo novedoso de este año es que han localizado plantaciones en todo tipo de inmuebles o zonas con instalaciones cada vez más sofisticadas para optimizar la producción.

Prueba de ello es la última intervención de los Mossos, que la semana pasada localizaron un macrocultivo de marihuana en una zona boscosa y apartada del Alt Urgell. Concretamente, hizo falta el uso de drones para localizarla en una aislada de Fígols i Alinyà. Fueron detenidos seis hombres y los agentes hallaron dos zonas bien separadas, una para el cultivo y otra para hacer vida por parte de los cultivadores y vigilantes. Proliferan las encontradas junto a zonas accesibles al agua, como una desmantelada entre Àger y Os de Balaguer junto al pantano de Canelles. Asimismo, también se han detectado áreas de producción en naves industriales pero también en viviendas, incluso en la planta superior de una casa unifamiliar en Pardinyes y en el sótano de un conocido asador en la carretera de Llívia. También se han llevado a cabo operativos policiales que han permitido la incautación de importantes cantidades de esta droga, como los más de 390 kilos, valorados en 2,5 millones, interceptados en Lleida, Rosselló y Vilanova de la Barca, hasta vehículos que transportaban marihuana (41 kilos en Vielha y 55 kilos en El Pont de Suert). También se han podido relacionar a algunos arrestados en las plantaciones con robos, incluso de armas.

La vegetación es la mejor aliada para la plantación

La semana pasada, efectivos de la Policía catalana desmantelaron una plantación en una zona boscosa y aislada en Fígols i Alinyà, en la comarca del Alt Urgell. Se encontraba en una zona de difícil acceso, a la que solo se podía llegar a pie. Además de los bancales donde se cultivaban las plantas, se encontraron con estructuras destinadas a la vida cotidiana de los cultivadores: cocina, comedor y tiendas para dormir.

La ‘maría’ origina casi la mitad de la luz defraudada

Endesa ha detectado en el primer semestre del año 17 conexiones ilegales que alimentaban plantaciones de marihuana en las comarcas leridanas. Este dato supone que el 45% de la energía defraudada en la demarcación durante este periodo está asociada a este tipo de cultivos, que equivalen a 6,5 millones de kilovatios hora o, lo que es lo mismo, el consumo anual de los hogares de un municipio como Guissona.

‘Indoor’ sofisticado y junto a una carretera en Gualda

El pasado abril, los Mossos desmantelaron una plantación oculta en un antiguo almacén frutícola junto a la N-230 en Gualda que tenía capacidad para generar dos millones de euros al año. El cultivo contaba con iluminación ley y podía producir 200 kilos de marihuana por cosecha. La Policía destacó la sofistificación de este cultivo ‘indoor’, situado, además, junto a una carretera y un lugar apartado para pasar desaparecibidos.