LLEIDA
Datos revelan que entre un 20 y 30% de los autores de abusos sexuales en niños también son menores
Joan Mayoral, coordinador de la Estrategia Barnahus en Catalunya, hace un balance positivo del arranque de estos equipamientos en Lleida y La Seu
Llevan menos de un año y ya están atendiendo 210 casos
“Todo el mundo identifica la violencia sexual entre un adulto y un niño, pero muchas veces los abusos se cometen entre iguales. Los estudios dicen que entre un 20 y un 30% de los agresores son menores, algunos de ellos por debajo de los 14 años, por lo que no son imputables”. Así lo asegura a SEGRE Joan Mayoral, coordinadora de la Estrategia Barnahus para el abordaje integral de los abusos sexuales contra la infancia y la adolescencia en Catalunya.
En la entrevista, Mayoral hace un balance positivo de los primeros meses del funcionamiento de estos equipamientos en Lleida y La Seu d’Urgell, que están atendiendo actualmente un total de 210 casos, 180 la primera y una treintena, la segunda, cuando hace menos de un año que entraron en servicio. Respecto a la esencia de la Barnahus, Mayoral remarca que los objetivos son ofrecer un espacio amable, que sea la puerta única para que las víctimas se sientan acogidas para ser atendidas y, también, hacer aflorar el número de casos que hasta la fecha no se llegaban a denunciar. “Era necesario conocer la realidad para poder intervenir y en Catalunya ya estamos trabajando cerca de 1.700 casos. Estos equipamientos facilitan la denuncia porque trabajamos todos juntos”, defiende.
En este sentido, explica que desde el pasado 1 de julio las Barnahus ya pueden acoger las pruebas preconstituidas (testificales de los menores), para evitar que estos tengan que declarar en el juicio. Asimismo, se ha formalizado un protocolo con los colegios de abogados para que los menores tengan a su disposición un letrado de oficio, si así lo desean, a la hora de denunciar. “Se trabaja desde la proximidad del domicilio de la víctima y no donde han tenido lugar los hechos, con la acogida en un único espacio de todos los profesionales para atender las necesidades de cada víctima”, remarca. Un modelo que, además de evitar la revictimización y poner a la víctima en el centro, ya ha provocado cambios en la Justicia. Un estudio preliminar de la Universitat Rovira i Virgili y la UOC apunta a que la Barnahus ayuda a reducir los tiempos de los procedimientos judiciales, hay menos sobreseimientos o archivos y se consiguen más condenas. “Seguiremos haciendo camino”, asegura.
Espacios descentralizados en Tremp y Vielha
La Estrategia Barnahus trabaja también porque la dispersión territorial afecte lo menos posible a las víctimas. De esta forma, Joan Mayoral, explicó que desde el centro de La Seu d’Urgell, que atiende todos los casos del Pirineo, se buscan espacios descentralizados y ya se han hecho intervenciones con entrevistas en Tremp y Vielha.
Incluso se han atendido víctimas de Andorra y otras de abusos que han sido cometidos en el extranjero. Asimismo, Mayoral recuerda que trabajan con tres supuestos: casos ya denunciados, casos que se quieren denunciar y los que ni se han denunciado ni se tiene intención de hacerlo. “En este último supuesto, nos coordinamos con la Fiscalía para que estudie qué puede hacer”, explica. También cuentan con acompañamiento con perros para aliviar el estrés a las víctimas. En el proceso de mejora, los centros incorporarán profesionales del departamento de Justicia y un trabajador social de Educación. “Son posibles gracias a la implicación de los departamentos de Derechos Sociales, Salud, Educación, Interior, Justicia y Salud”, destaca Mayoral. Un modelo pionero en el Estado que ha despertado el interés como referencia de otras comunidades autónomas y países.