El padre del niño muerto en la Rambla el 17-A presenta una demanda al TEDH por la "falta de investigación exhaustiva" de los hechos
El pequeño, vecino de Rubí, estaba vinculado a la localidad de Llimiana
Reclaman que se amplíe la investigación y que se resuelvan las "dudas" sobre la muerte y las conexiones del imán de Ripoll
El padre del niño de tres años muerto en la Rambla de Barcelona en los atentados del 17 de agosto del 2017, vecino de Rubí y vinculado a la localidad de Llimiana, ha interpuesto una demanda en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) por la "falta de investigación exhaustiva" de los hechos por parte de España. El documento, en lo que ha tenido acceso la ACN, defiende que se han excluido "cuestiones clave" sobre los antecedentes y autores del ataque, así como sobre su relación con las autoridades españolas. El demandante defiende que eso supone una violación del derecho a la vida y a un recurso en virtud del Convenio Europeo de Derechos Humanos, así como del derecho a conocer la verdad. Entre otros, plantea las "dudas" sobre la muerte y las conexiones del imán de Ripoll.
La defensa del demandado asegura que las investigaciones que llevaron a las condenas tuvieron un "alcance limitado" que dejó aspectos importantes sin abordar. Todo dio como resultado para el demandante una investigación "restringida" que no permitió aclarar elementos clave y por eso reclama ahora resolver estos elementos.
En primer lugar, critican que sólo se impusiera a los tres acusados los hechos de Alcanar y no los ataques a la Rambla y Cambrils. Por otra parte, también plantea que la investigación excluyó preguntas sobre el imán de Ripoll Abdelbaki Es Satty. Por una parte, apunta a la "prematura" conclusión sobre que uno de los cuerpos encontrados en la explosión de Alcanar era el de Es Satty y defensa que existen "serias dudas" sobre cómo los investigadores llegan a esta conclusión, como la presencia del imán en Alcanar la noche anterior o el hallazgo de ADN en una lata de refresco.
En este sentido plantea también que hay testigos que aseguraron ver la furgoneta del imán alejarse después de la explosión, que hubo actividad en su móvil después y que su familia no ha reclamado nunca su cuerpo. La defensa del demandante reconoce que nada de eso permite concluir que Es Satty sobrevivió a la explosión pero defiende que hay "motivos serios" para cuestionar la conclusión de que el imán murió allí.
Por otra parte, se pide investigar las conexiones del imán con los servicios de inteligencia españoles, donde la demanda asegura que también hubo exclusiones en la investigación. En este sentido, plantea la necesidad de aclarar si Es Satty tenía todavía relación con los servicios de inteligencia en la época de los ataques.
En el escrito, se defiende que el padre del niño ha hecho uso de todos los recursos estatales posibles con el fin de pedir estas investigaciones y que no hay más camino judicial posible, por eso se presenta la demanda delante del TEDH.
Según la defensa del demandado, todo supone una violación de los artículos 2 y 13 de la Convención Europea de los Derechos Humanos. El primero con respecto al derecho a la vida y el segundo sobre la concesión de un recurso efectivo ante una instancia estatal.
Por todo ello, reclama que se reconozcan estas violaciones y que se inste el Estado a garantizar una investigación "completa y efectiva" sobre las circunstancias y "todos" los responsables de los ataques a Barcelona y Cambrils.