Más de 3.000 euros por cazar un rebeco en el Pirineo de Lleida en monterías de 'alto standing'
El turismo cinegético para clientes de alto poder adquisitivo arraiga en el Pirineo, donde empresas y particulares ofrecen, a menudo en webs especializadas, la participación en recechos y monterías que llegan a cotizar por encima de los 3.000 y los 4.000 euros y cuyo reclamo consiste en la posibilidad de abatir trofeos de caza como sarrios o rebecos.
El negocio de la caza mayor para escopeteros de alto poder adquisitivo avanza boyante en el Pirineo, donde empresas y particulares ofrecen la posibilidad de participar en recechos (estático) y monterías (batidas) por precios básicos que esta temporada, sin extras ni prolongación de fechas, van de 2.000 a 4.300 euros por jornada y trofeo.
Esas actividades, que se comercializan por varios canales entre los que destacan webs como Ferox o Hunty, tienen a menudo como escenario el Pirineo de Lleida.Uno de esos organizadores ofrece para enero, por 3.250 euros con una señal previa de 2.125 y un recargo de 150 por cada jornada extra de caza, la posibilidad de salir “en búsqueda de un sarrio (rebeco) macho sin límite de puntos en una de las cordilleras más bonitas de Europa como es el Pirineo catalán”.
La cacería se desarrolla en un coto cercano a La Seu d’Urgell con la compañía de “un experto de la zona que te ayudará a encontrar el rebeco más grande posible”. Rebeco pirenaico y sarrio son la misma especie. Otra propuesta, esta por 4.300 euros con 500 de señal y 250 por cada jornada de más, ofrece “una oportunidad única de abatir un gran trofeo de sarrio” a “los apasionados de la caza de alta montaña”.También se vende una “cacería al alcance de unos pocos debido a su dificultad” en la que “es muy probable que se pueda abatir una pieza única” como una hembra de sarrio. “Hay pocos afortunados que puedan vivir esta inolvidable experiencia”, añade.
Sale por 3.000 euros, con 400 de adelanto.Varios anuncios más ofrecen cazar rebecos en la Cerdanya y otras zonas del Pirineo de Lleida y, también, corzos en la Noguera y ciervos de alta montaña. Los primeros se ofertan a 700 euros el trofeo y los segundos a 2.500.Este tipo de cacerías está situando en algunas zonas rurales de Catalunya y del Estado al turismo cinegético como un floreciente negocio con clientes de elevado poder adquisitivo, en un proceso paradójico frente a la evolución de la caza tradicional, que en el caso de Lleida ha perdido el 30% de los usuarios en una década: 3.000 de los 7.000 cazadores han colgado la escopeta en los últimos diez años en las comarcas de Ponent, según datos de la federación provincial.
Los Agents Rurals no ven, en general, mayores contraindicaciones en este tipo de cacerías. “No hay problema en que se realicen estas de actividades siempre que se cumpla lo que marca la normativa”, explican fuentes del cuerpo encargado de “supervisar que todo se haga dentro de la legalidad” en los cotos y en las reservas de caza.
La venta, o más bien subasta, de permisos para abatir piezas de caza mayor lleva décadas operando como una vía de ingresos para numerosos municipios de la montaña, especialmente en comarcas como la Val d’Aran, el Alt Urgell y el Pallars Sobirà. Alins prevé ingresar un mínimo de 43.900 euros este año por 26 piezas y seis trofeos e Isil, 27.160 por 16 y 4.
Los organizadores de cacerías trabajan con amplios márgenes: sus precios superan entre un 20% y un 40% las pujas de salida de las subastas municipales para los trofeos y llegan a doblar a los de menor categoría.
Las condiciones de las cacerías
- Precios por especies. Cotizaciones de los trofeos. Las cotizaciones de los trofeos varían en función de las especies, con el rebeco o sarrio como la de más cuantía, superando los 3.000 euros por ejemplar con alguna excepción a 2.000 euros. El ciervo está en 2.500 euros.
- Señales de reserva. Las señales de reserva varían según varios factores, y van desde los 100 euros para un corzo y los 250 euros para un ciervo hasta alrededor de los 2.000 euros para sarrios o rebecos.
- ¿Y si no se abate la pieza? El coste de la jornada depende del acuerdo. En algunos casos, se paga el precio íntegro por adelantado, mientras que en otros se ofrece la posibilidad de pagar solo el día de monte, que cuesta entre 100 y 250 euros.
- ¿Y si el animal huye herido? Solo una oferta incluye este matiz, previendo pagar la pieza como abatida si el perro que participa en la batida localiza un rastro de sangre del animal.
- Ampliación de la cacería. La práctica totalidad de las propuestas contempla la posibilidad de prolongar la búsqueda del ejemplar, con precios que van de los 100 a los 250 euros por cada jornada adicional.