LLEIDA VACIADA PLANIFICACIÓN
Nuevos incentivos para arraigar población en pueblos españoles con menos de 2.000 habitantes
El Estatuto del Municipio Rural en Catalunya ofrecerá ventajas fiscales y discriminación positiva al 80% del territorio de Lleida y al 40% de su población
El Estatuto del Municipio Rural, recientemente aprobado por la Generalitat de Catalunya, busca fijar población en los pueblos de menos de 2.000 habitantes y revitalizarlos a través de una serie de medidas innovadoras. Esta normativa, que se espera entre en vigor en 2025, beneficiará a cerca del 80% de los municipios de Lleida y al 40% de sus habitantes, residentes en alguno de los 196 pueblos leridanos considerados rurales o asimilables.
Entre las principales ventajas contempladas en el estatuto, se encuentran deducciones en la declaración de la renta de entre 750 y 1.000 euros para quienes trasladen su residencia principal a un municipio rural y tengan hijos menores, o para aquellos que adquieran una vivienda para vivir en estos pueblos. Además, se prevén deducciones del 15% al 20% para la rehabilitación de la vivienda habitual y en el alquiler. Otras medidas incluyen un mecanismo rural de garantía para incorporar la perspectiva rural en políticas y leyes, una asignación específica del fondo de cooperación local para ayuntamientos, un suplemento para municipios que se fusionen y más ayudas específicas.
Los impulsores del estatuto lo consideran un instrumento imprescindible para estos municipios. Joan Solà, alcalde de Riner y presidente de la asociación de Micropueblos de Catalunya, destaca que la nueva ley "incorpora una mirada rural" en toda la planificación política. Por su parte, Jaume Gilabert, alcalde de Montgai y miembro de Eines de Repoblament Rural, señala que ya no se trata solo de repoblar, sino de arraigar a la gente a los pueblos, siendo los propios vecinos los principales beneficiarios.
Instrumento clave para evitar costes excesivos y adaptar la legislación
La alcaldesa de Tremp, Sílvia Romero, ve el estatuto como un "instrumento magnífico" para evitar que trámites o servicios resulten demasiado caros para los municipios rurales. En el caso de Vilanova de l'Aguda, un ejemplo de micropueblo en proceso de despoblación, la alcaldesa Carla Mascó espera beneficios en la legislación urbanística, que debe adaptarse al mundo rural, así como en la estabilización de la población y el acceso a servicios básicos.
Aún quedan retos por abordar, como el mantenimiento de servicios básicos
A pesar de los avances que supone el Estatuto del Municipio Rural, aún quedan carencias y desafíos por afrontar. El alcalde de Preixana, Jaume Pané, aunque felicita a los impulsores del estatuto, lamenta que todavía tiene muchas carencias. Pané demanda soluciones para que los municipios pequeños puedan mantener servicios básicos como tiendas de proximidad o acceso a entidades bancarias, algo que su localidad ha tenido que afrontar abriendo una agrotienda municipal sin ningún tipo de ayuda.
La despoblación rural, un fenómeno extendido en España
La despoblación rural es una realidad que afecta a muchas zonas de España, especialmente a las áreas de interior y de montaña. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2021 había 4.997 municipios con menos de 1.000 habitantes, lo que representa el 61,5% del total de municipios españoles. Sin embargo, estas localidades apenas concentran el 3,1% de la población total del país.
Frente a esta situación, diversas administraciones han puesto en marcha iniciativas para tratar de frenar y revertir la despoblación rural. Además del Estatuto del Municipio Rural de Catalunya, a nivel nacional destaca la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico, aprobada en 2021, que contempla 130 medidas en ámbitos como la economía, los servicios públicos, la conectividad o la vivienda.
Un enfoque integral y a largo plazo para garantizar el arraigo y la supervivencia de los pueblos
El reto de la despoblación rural requiere de un enfoque integral y a largo plazo, que combine medidas de discriminación positiva, incentivos fiscales y mejoras en los servicios e infraestructuras de los pueblos. Solo así se podrá garantizar el arraigo de la población en estos municipios y su supervivencia en un contexto de creciente concentración urbana. Iniciativas como el Estatuto del Municipio Rural de Catalunya suponen un paso importante en esta dirección, pero aún queda mucho camino por recorrer para asegurar un futuro próspero y sostenible para los pueblos de España.