Inundaciones, riadas y avenidas: una historia trágica en las comarcas de Lleida
Los episodios más devastadores: la riada de 1874, las inundaciones de 1982 en la Vall d'Aran y Pirineo, y las crecidas mortales del Sió y la riera de Torà
El grave episodio que deja el paso de la DANA por Valencia nos recuerda los casos más trágicos en nuestra casa. Les comarcas de Lleida han sufrido a lo largo de la historia numerosos episodios de avenidas y riadas que han dejado un rastro de tragedia y devastación. Entre los más graves, destacan la riada de 1874, que arrasó la Segarra, el Urgell y las Garrigues, causando más de 400 muertos, y las inundaciones de 1982 en el Valle de Arán y el Pirineo leridano, que se cobraron 22 vidas.
En las últimas décadas, episodios como la avenida de la riera de Torà en 1987, que segó la vida de seis niños y una mujer, o la crecida del Sió en Agramunt en el 2015, que mató a cuatro ancianas en uno geriátrico, han vuelto a golpear con fuerza estos territorios. En 1989, el desbordamiento simultáneo del Sion, lo Ondulara y el Corb también causó dos muertes a Agramunt.
Otros episodios destacados
Además de estas tragedias, las comarcas leridanas han tenido que afrontar otras emergencias por avenidas en los últimos años. En el 2013, una crecida del Garona obligó a desalojar a 300 personas, mientras que en el 2019, una DANA causó graves daños en las Garrigues y el Pla d'Urgell.
Estos episodios ponen de manifiesto la vulnerabilidad del territorio ante fenómenos meteorológicos extremos y la necesidad de adoptar medidas de prevención y protección para minimizar el impacto. La memoria de estas tragedias permanece viva en la población, que año tras año rinde homenaje a las víctimas y trabaja para construir un futuro más resiliente.