Propietarios y ayuntamientos exigen que la Generalitat regule ya la entrada al bosque de buscadores de setas

Propietarios de bosques y ayuntamientos reclaman a la Generalitat una normativa que regule la entrada al bosque para controlar los destrozos que causan algunos boletaires. La buena campaña de setas, la mejor desde hace 5 años después de años de sequía, ha provocado que una verdadera avalancha de aficionados se dirijan a la montaña a llenar sus cestas. “Olvidan que el 85% de la superficie forestal catalana es propiedad privada y, por lo tanto tiene un dueño”, asegura Juan Martínez, responsable en este campo del Centre Tecnològic Forestal de Catalunya, ubicado en el Solsonès. “Hace diez años las encuestas ya contabilizaban 1,2 millones de boletaires en Catalunya” que con seguridad se han multiplicado y toman los bosques en campañas como la actual y en muchas ocasiones venden el producto.

La familia del alcalde de Navés, Josep Maria Casafont, es propietaria de unas 50 hectáreas de bosque. “Entran sin ninguna consideración. Cada semana mi hermano tiene que volver a instalar los hilos electrificados de las vallas que guardan el ganado porque las rompen y los animales se desperdigan. En un bancal del 20 metros te puedes encontrar 40 coches. Y de la basura, a veces hemos recogido bolsas llenas. Es como si en Lleida entraran en los campos de frutales, se llevara las manzanas para venderlas y dejaran todo hecho un asco”. 

Casafont asegura que esta es la opinión de todos los propietarios de fincas y de los consistorios con terrenos que exigen una normativa que regule el acceso a la montaña contando con el territorio y que si hay repercusiones económicas por la aplicación de tasas vayan dirigidas a beneficiar a los que salen perjudicados.

El alcalde de Coll de Nargó, Martí Riera, instó a la Generalitat para que impulse “un modelo de regulación genérico para todos los municipios afectados por esta masificación que padecemos” y que “luego cada municipio lo adapte a su realidad”. Explicó que en temporadas buenas como la de este año “nos sentimos invadidos” y “estamos empezando a ver mafias que arrasan con todo”, “vienen, recogen todas las setas que les interesa, a veces para su venta, y queda todo destrozado”, “a esto ya no se le llama ir a coger setas”, lamentó. Será difícil ya que es una tarea que precisa de personal que vigile y que gestione las infracciones.

Normativa para aparcamientos y carnets como en la caza y pesca

Los propietarios son conscientes de que no se puede vetar la entrada al bosque aunque se ha hecho necesario controlar el acceso. Creen que es verdaderamente urgente regular el estacionamiento de vehículos y luego contar con algún permiso del titular de las fincas, además de vigilancia. La normativa ha de hacer posible que los propietarios tengan algún tipo de mecanismo para que los dueños puedan llamar a Forestales o Mossos para denunciar actos vandálicos. Instaurar un carnet de boletaire es una alternativa así como adaptar experiencias que ya funcionan en la caza y la pesca.