BARCELONA
Solo un 36% de las viviendas son para los vecinos en Aran, que urge medidas
La síndica de Aran, Maria Vergés, compareció ayer en el Parlament para informar de la situación de la Val y su autogobierno. Reclamó actuaciones “contundetes” para hacer frente a la acual crisis de la vivienda, al mismo tiempo que pidió un reconocimiento “jurídico y administrativo explícito y singular” y representación directa en la cámara.
“¿Cuál es la sostenibilidad de nuestra autonomía política? Sabemos que estamos en el camino correcto, pero no queremos recorrerlo solos”, manifestó ayer la Síndica de Aran, Maria Vergés, durante su comparecencia anual en el Parlament para exponer las reivindicaciones aranesas. Lo hizo a las puertas del décimo aniversario de la Ley de Régimen Especial de la Val, que entró en vigor en 2015 y cuyo texto pidió modificar y adaptar, con el fin de conseguir un reconocimiento jurídico y administrativo singular explícito.
La Síndica reclamó actuaciones “contundentes” en materia de vivienda, y detalló que en la Val solo hay un 36% de casas disponibles para residentes. “Para que un territorio esté vivo su gente tiene que querer vivir en él”, dijo, y extendió esta afirmación al resto del Pirineo, sobre el que alertó que está “poco cohesionado y mal comunicado”. En la misma línea, pidió más competencias en materia de salud y cultura. Reclamó un nuevo modelo de financiación estructural y estable y afirmó que “los araneses no hemos tenido nunca otro señor que Dios”, parafraseando Joan Narro, un diputado aranés que en 1931 dirigió estas palabras al entonces presidente de la Generalitat, Francesc Macià. Por otra parte, la síndica reconoció avances en la presencia de la lengua de Aran en los medios públicos de Catalunya, aunque lamentó que son insuficientes, y pidió también normalizar su uso en los medios estatales. En este sentido, instó a “trabajar con los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados en el reconocimiento por parte del Estado de la singularidad de Aran”.
La síndica pidió más recursos para desplegar nuevas políticas en materia de lengua y salud
Los partidos en la oposición respondieron a la Síndica (ver desgloses). El diputado del PP Juan Fernández dijo que “las reivindicaciones de la Val d’Aran son más legítimas que las que se practican desde la deslealtad”. David Cid, de los Comuns, pidió fortalecer la gestión del patrimonio forestal de la Val como una manera de “descarbonizar la economía” y apuntó a la necesidad de un cambio en el modelo productivo del territorio. En la misma línea se expresó Laia Estrada, de la CUP, que dijo que “las decisiones sobre Aran y el Alt Pirineu no pueden tomarse sin ellos”, por lo que pidió que “Aran pueda gobernarse con el derecho a decidir sobre su futuro”. Rosa Maria Soberana, de Aliança Catalana, lamentó que solo un 19,7% de los araneses usan la lengua de la Val de manera habitual, frente a un 44% de castellano, lo que calificó de “fracaso de las políticas aplicadas por el Conselh, que tiene plenas competencias”.
Pleno monográfico sobre Aran en 2025
El Parlament prevé celebrar el próximo año un debate monográfico sobre la situación de la Val d’Aran, dando así respuesta a la petición de la Síndica, que lo pidió en septiembre. En la misma línea, el conseller de Presidencia, Albert Dalmau, aseguró que antes de finalizar el año se reunirá la comisión bilateral entre el Conselh y la Generalitat, con el objetivo de estudiar, debatir y hacer propuestas para el desarrollo del autogobierno de Aran.
Intervenciones en aranés, salvo Vox
Todos los grupos parlamentarios efectuaron parte de su respuesta a la Síndica en aranés, a excepción de Vox. En este sentido, la diputada de Junts Jeannine Abella reivindicó que “la plurinacionalidad es un valor” y puso en duda la gestión del actual Govern de la conselleria de Política Lingüística. Por su parte, Marta Vilalta, de ERC, alertó que actualmente no se cubre la demanda de cursos de aranés y pidió acelerar la estandarización del nivel C2.
Medidas para retener talento y jóvenes
“La igualdad entre ciudadanos no puede pasar por que el lugar de residencia condicione la calidad de los servicios públicos”, aseguró la Síndica. Pidió una discriminación positiva para las comarcas de montaña, con el fin de retener talento, y alertó que temas como la nueva ley de residuos, que obliga al ciudadano a asumir la totalidad del coste del servicio, supondrá para Aran un agravio en comparación con otras zonas debido a su elevado coste.