LLEIDA
Catalunya y Aragón borran la frontera para atender las urgencias de 85.000 ciudadanos
Renuevan el convenio para cubrir las emergencias médicas en la zona limítrofe, que llevaba 6 años caducado. Negocian otro acuerdo que permitirá tratar en Lleida a pacientes oncológicos de la Franja
“Hemos borrado los límites: el que esté más cerca de la urgencia, la atenderá”, aseguró la consellera de Salud, Olga Pané, tras firmar con su homólogo aragonés, José Luis Bancalero, el convenio que durante cuatro años (prorrogables por otros tantos) regulará la atención de las emergencias médicas en 36 municipios de la zona occidental de Catalunya (26 de Lleida) y 46 de la oriental de Aragón (29 oscenses). “Lo fundamental es dar atención en el territorio, procedan de donde procedan los medios asistenciales”, añadió Bancalero.
El convenio contempla un protocolo de coordinación de los dos servicios sanitarios para atender las llamadas al 112 y al 061 en esos 82 términos, en los que residen 85.000 personas: 30.000 en la catalana y 55.000 en la aragonesa. “Habrá contacto permanente”, explicaron fuentes sanitarias, y las hospitalizaciones se decidirán “según criterios médicos”.
“El tratamiento oncológico tiene un coste elevado, y hemos de actualizarlo”, dice la consellera Olga Pané
El acuerdo busca coordinar y asegurar la cobertura de las emergencias en las áreas limítrofes, donde se daban episodios de desatención por motivos geográficos.
Este acuerdo, que ambos destacaron como ejemplo de cooperación y que mejora el acceso a la atención sanitaria en zonas de dispersión y envejecimiento demográficos, es la antesala de la renovación del que regula la atención primaria y de especialistas en la zona limítrofe, con los hospitales Arnau de Vilanova, de Vielha y Comarcal de Barbastro y con CAP como los de El Pont de Suert y Tremp y y centros de salud como el de Benavarri como principales receptores de usuarios de la comunidad vecina.
Bancalero destacó que el convenio de las emergencias carece de apartado económico, un detalle al que se refirió como “un síntoma de la buena relación entre los dos sistemas sanitarios”.
El apartado económico es, por el contrario, uno de los flecos que falta por ajustar para cerrar en segundo de los convenios, que lleva 6 años caducado.
El Arnau presta más de 50.000 atenciones a usuarios aragoneses al cabo del año, señaló Pané, quien, como Bancalero, se mostró favorable a que los pacientes oncológicos de la Franja, cuyo centro de referencia es el hospital de Barbastro, puedan ser atendidos en el hospital leridano.
“El tratamiento oncológico incluye innovaciones tecnológicas con un coste elevado, y eso hay que actualizarlo. Nos hemos de poner de acuerdo en cómo lo hacemos”, explicó Pané.
“Hemos de garantizar la privacidad”
La consellera de Salud de la Generalitat, Olga Pané, anunció para “el año que viene, en cuanto podamos”, la sustitución de las cortinas que ahora separan a las parturientas en el Arnau por “soluciones más rígidas, más físicas, que garanticen la privacidad de las mujeres”. No obstante, la “solución definitiva” queda pospuesta al final de las obras de ampliación del hospital y el traslado a ella de los quirófanos, cuyo espacio pasará a ser ocupado por Obstetricia.
“Tenemos dificultades para captar personal”
La consellera garantizó la continuidad de las primas salariales para atraer a médicos a regiones sanitarias como las de Lleida o Pirineu i Aran, que a menudo resultan poco atractivas para éstos. “Tenemos dificultades para captar profesionales en el ámbito de la atención primaria”, dijo Pané, que apuntó a la necesidad de cometer “mejoras organizativas que hagan atractivos esos puestos de trabajo” porque “no es un problema de salario” solo.