Piden el agua del canal de Urgell para Barcelona a cambio de 120 millones para modernizarlo

Cuatro colegios oficiales de ingenieros y economistas propusieron ayer bajo el paraguas del Observatorio Intercolegial del Agua un gran pacto entre los regantes del Segre y la región metropolitana de Barcelona, “a negociar con el territorio de Lleida, para intercambiar inversión para la modernización del riego con un caudal de 50 hectómetros cúbicos de agua al año solo en situación de emergencia, un 20% del ahorro de agua que resultaría de la modernización del Urgell”.

“Proponemos retomar la propuesta del año 2012: agua del Noguera Pallaresa hacia Barcelona”, señala el documento, en referencia a la armonización de este río ya prevista en el proyecto del Urgell. Modernización y armonización permitirán un ahorro de 250 hectómetros anuales que servirán para caudal ecológico del Segre, incrementar el riego en el Urgell y el caudal del Segarra-Garrigues. El punto de partida, añade la propuesta, es ahorro de agua a cambio de obras, en este caso, un 20% del excedente de agua (50 hectómetros) para situaciones de emergencia en Barcelona. En compensación, Aigües Ter-Llobegat financiaría con 120 millones el 12% de las obras de modernización hasta pie de parcela. El agua costaría 1 euro el metro cúbico.

La propuesta estima en 5.000 millones la inversión necesaria para la modernización de riegos

El documento de los expertos añade también que la conexión supondría invertir 400 millones en una conducción de 65 kilóemtros y un diámetro de 1,4 metros que solo se utilizaría para emergencias. Sin embargo, la propuesta de ingenieros y economistas para modernizar el regadío supera los 5.000 millones para toda Catalunya (ver desglose).

El informe presentado ayer, elaborado por cuarenta profesionales, se titula Bases para la transición hidríca y estima que en 2050 la demanda de agua en Catalunya subirá de 4.550 a 5.353 hectómetros cúbicos de agua al año y la oferta caerá, en un contexto de cambio climático, de 7.141 hectómetros a 5.873 en un año medio (1.898 a 1.678 en sequía). En su conjunto, las medidas planteadas ayer permitirían situar la demanda en 4.782 hectómetros (un 10% menos) y la disponibilidad, en 6.379 hectómetros en 2050.

“Planteamos este documento para un acuerdo entre territorios”

La de ayer no es una propuesta nueva y está en parte inspirada en el Compromís per Lleida de hace una década. Sin embargo, concreta más detalles y adapta la propuesta al contexto de crisis climática. Los expertos plantean una inversión de 21.960 millones de euros en una solución poliédrica para combatir la sequía: modernización del riego, interconexión de redes; regeneración y reutilización del agua; desalación y ahorro.

En el primer caso, proponen invertir 3.930 millones de euros para la modernización del riego en Catalunya, sobre todo el del Urgell. Otros 1.080 millones se destinarían a la tecnificación del riego en parcela. En cuanto a la conexión de las redes de agua, plantean recuperar la prolongación del ministrasvase a Tarragona para que llegue a Barcelona. Un corredor litoral del agua enlazaría las redes de Girona, Aigües Ter-Llobregat y el Consorci d’Aigües de Tarragona (CAT, ya en el Ebro). En desalación plantean lograr 360 hectómetros con seis desaladoras (ahora hay dos en marcha y dos en proyecto) y en regeneración y reutilización, otros 427 que irían a usos urbanos, industriales y otros.

Carles Conill, uno de los firmantes del documento, explicó ayer a SEGRE que “la clave es el acuerdo, un pacto entre el agua urbana y el agua agrícola. Ponemos este documento sobre la mesa para que haya un acuerdo entre territorios”. El documento se ha remitido a la Generalitat y a los regantes del canal.