Los núcleos de Corçà y Sant Josep de Fontdepou ya tienen desfibrilador

El ayuntamiento de Àger ha instalado dos desfibriladores externos automáticos (DEA), en el núcleo de Corçà y en el de Sant Josep de Fontdepou, para mejorar la respuesta ante posibles emergencias cardíacas. Los aparatos se han adquirido a través de la contratación de la Associació Catalana de Municipis (ACM) y han tenido un coste de 3.000 euros, financiados con fondos propios del consistorio.

El municipio de Àger pertenece al Área Básica de Salud del Balaguer y cuenta con servicio médico entre dos y tres días a la semana, lo que hace especialmente necesaria la presencia de estos dispositivos en zonas alejadas del territorio. La alcaldesa, Mireia Burgués, destacó que los primeros minutos en caso de paro cardíaco son determinantes para la supervivencia e incidió en la importancia de disponer de estos equipos para la seguridad de los vecinos. La primera edil avanzó el compromiso del consistorio para organizar formaciones para enseñar a la población cómo utilizar los desfibriladores para crear una “comunidad” más preparada con el objeto de afrontar urgencias. Está previsto que el próximo año se adquieran nuevos dispositivos para otros pueblos reafirmando la apuesta por la salud y la seguridad de los vecinos.