LES BORGES BLANQUES
La Fira de l'Oli de Les Borges Blanques crece en visitantes e iguala las ventas récord del pasado año
Un 55% de los participantes en talleres y actividades han venido de Barcelona
Satisfacción entre los participantes de la 28 Fira de l'Oli de Les Borges, que bajó ayer el telón con un aumento de visitantes, especialmente de Barcelona, y unas ventas similares a las del pasado año, que fueron de récord. La localidad busca así fortalecer su capitalidad en el sector, coincidiendo con una campaña con hasta un 40% menos de producción.
La Fira de l’Oli de Les Borges Blanques bajó ayer el telón de su 28 edición dejando un buen sabor de boca tanto a productores como a visitantes. Esta edición iba orientada a reforzar la capitalidad de Les Borges en el sector, con expositores de zonas de más allá de Les Garrigues como el Pallars, las comarcas de Tarragona e incluso Jaén, además de infinidad de talleres, showcookings y degustaciones de productos. Francesc Vilanova, de la cooperativa Sant Isidre, manifestó que “hace años que la Fira ha cogido un rumbo que creemos acertado, poniendo en el centro la calidad del producto, lo que nos diferencia”.
En cuanto a las ventas, esta cooperativa calcula repetir las cifras récord del pasado año, unos 12.000 litros de aceite, un 5% del total de la campaña. Esta cifra representa solo una pequeña parte del total de garrafas que se han vendido estos días en la feria, con una bajada generalizada de los precios respecto el pasado año. La voluntad de apertura de la Fira se ve reflejada con la participación en las distintas actividades organizadas. Una de las más intensas han sido los talleres de degustación de aceite, conducidos en la Oleoteca, inaugurada el viernes, por la experta Montse Freixa. Se ha registrado un pleno total con más de 320 participantes el fin de semana.
De todos, destaca la presencia de personas procedentes de la demarcación de Barcelona, que suponen el 55% del total, sobre todo originarios de la capital catalana, Sabadell, Sant Cugat del Vallès y el área del Maresme. Otros participantes han venido de Lleida ciudad, Alpicat, Les Garrigues e incluso València. Por otra parte, la Fecoll inició el sábado el ciclo de Caragolades Solidàries 2025 en el marco de la Fira de l’Oli. Repartió unas 300 degustaciones, recaudando más de 1.400 €, que destinará íntegramente a la Associació Initché, con sede local.
«Presentamos algo único»
Olea Drinks, de Sant Martí de Barcedana, en el Pallars Jussà, ha presentado durante la Fira de l’Oli y en primicia un producto “único, que incluso hemos patentado”, explicó Joan Enric, responsable comercial de la firma. Se trata del nuevo licor Kilato, elaborado con base de olivas y hojas de olivo. Este es solo un ejemplo que refuerza la idea de que el certamen va más allá de la venta de aceite, ya que es también un escaparate de novedades gastronómicas.
«Vendemos historia y cultura»
Tomàs y Batiste cultivan olivos en Ribera d’Ebre y la Terra Alta. Este es el segundo año que participan en la Fira de l’Oli para “dar a conocer un producto diferente, hecho con variedades autóctonas, lo que deriva en un sabor complejo, distinto al de aceites hechos con arbequina”. “La Fira nos sirve también como escaparate para vender no solo aceite, también una manera distinta de trabajar y cultura e historias que van unidas a ellas”.