Relevo en el aeropuerto de Alguaire: un ingeniero de la localidad asume la dirección

Xavier Gómez Jordana asumirá el próximo miércoles la dirección del aeropuerto de Alguaire en sustitución de Antoni Serra, que se jubila tras siete años como director y otros dos y medio en los inicios del aeropuerto como responsable de operaciones del equipamiento, que este mes cumple 15 años.

Gómez Jordana es natural de Alguaire, estudió ingeniería técnica aeronáutica (Universidad Politécnica de Madrid) e hizo el Proyecto de Final de Grado sobre el plan director del aeropuerto de Alguaire. De hecho, trabaja en Aeroports de Catalunya desde 2015, donde ha ejercido de como director del aeródromo de la Cerdanya y durante seis años como técnico de operaciones de Alguaire. Antes, había estudiado también ingeniería técnica industrial (UdL).

Ayer participó en el homenaje que decenas de trabajadores y personal vinculado al aeropuerto rindieron a Antoni Serra cinco días antes de dejar el cargo. Serra llegó a la dirección de Alguaire a principios de 2017 con el encargo de promocionar el aeropuerto y buscar nuevos nichos de mercado. Ahora se va habiendo abierto el camino de la reinvención y tras situar las instalaciones de Lleida entre las primeras en formación de pilotos y en número de operaciones a nivel estatal. También con un despliegue creciente de actividad industrial, que este 2025 acabará de despegar, avanza.

El todavía director del aeropuerto auguró que, “si todo va bien, este 2025 habrá un fuerte crecimiento de la actividad industrial” en las instalaciones de Alguaire (ver desglose).

Serra recibió ayer el cálido reconocimiento de la plantilla del aeropuerto y entre otros obsequios le entregaron un faro y, por parte del ayuntamiento, una reproducción en miniatura del Sagrat Cor de Alguaire. El director saliente afirmó que en estos años ha tejido un vínculo estrecho con el municipio.

Arrancan las obras de la residencia para estudiantes de piloto

La Generalitat ha iniciado las obras de la residencia de estudiantes dentro de las instalaciones del aeropuerto, pensadas para dar servicio a los alumnos de las escuelas de formación de pilotos, una de las principales actividades del aeropuerto. La nueva residencia tendrá 140 plazas, e irá acompañada de un centro de formación aeronáutica que dispondrá de un mínimo de tres aulas y dos salas de reuniones. La previsión es que las obras estén listas para el próximo verano. Los edificios de formación serán modulares. Junto a la actividad de formación, el incremento de la demanda de actividades en el aeropuerto ha llevado a impulsar un nuevo plan urbanístico para ampliar el espacio de las instalaciones.Una de las actividades que crecerán, por ejemplo, será la de desguace de aeronaves ya que el aeropuerto espera autorización de Aesa para que pueda dar cobijo gigantes de la aviación comercial como el Airbus 380 y el Boeing 747-800. Estas aeronaves con capacidad para más de 500 viajeros están cayendo en desuso y el aeropuerto leridano espera posicionarse como una instalación donde almacenarlas y desguazarlas.