LLEIDA
Una inmobiliaria de Terrassa compra el bloque okupado de Les Borges
El ayuntamiento espera reunirse la próxima semana con la empresa. Esta ya ha comunicado el cambio de propietario a inquilinos con contrato de alquiler social
Una inmobiliaria de Terrassa, Janus Business SL, ha comprado el bloque de viviendas de la calle Santiago Rusiñol de Les Borges Blanques donde conviven medio centenar de familias que han okupado pisos y una decena de inquilinos con contratos de alquiler social. Así lo anunció ayer en ayuntamiento, que avanzó que espera reunirse con los nuevos propietarios del inmueble la semana que viene. “En este primer contacto se pretende conocer de primera mano los planes de la nueva propiedad para el inmuble y establecer los canales de comunicación necesarios para garantizar una gestión adecuada del edificio”, explicó el consistorio.
Por su parte, inquilinos con contratos de alquiler social han recibido ya notificaciones del cambio de propiedad del inmueble, junto con el nuevo número de cuenta donde deberán pagar cada mensualidad. “Al llamar a la empresa nos dijeron que tenían intención de mantener los contratos de alquiler”, explicaron. No está claro por ahora qué hará Janus Business SL respecto a las viviendas okupadas. Este diario intentó ayer sin éxito recabar la versión de la empresa.
Este bloque de pisos ha sido desde hace años objeto de quejas por ruido, acumulación de basura y conflictos en su entorno. Vecinos de Les Borges se manifestaron el pasado mes de mayo para exigir soluciones. Sin embargo, los problemas se agravaron en junio, cuando Endesa cortó los empalmes ilegales que suministraban electricidad al edificio al apreciar riesgo de incendio. Esto dio lugar a protestas de los afectados y a tentativas de restablecer los empalmes. Un incendio días después del corte obligó a evacuar a varios habitantes del bloque. Desde entonces el suministro eléctrico no se ha restablecido.
El ayuntamiento, por su parte, negoció meses atrás la compra del inmueble, de 77 viviendas. Un total de 52 eran entonces propiedad de Inmocaixa (de la firma Criteria, que depende de la fundación de la Caixa), otras 14 de un fondo de inversión, una de CaixaBank y el resto de particulares.Sin embargo, el consistorio acabó renunciado a adquirir el bloque, al valorar que estaba muy deteriorado y que la inversión necesaria para rehabilitarlo era inasumible para las arcas municipales.