Alier crea 20 empleos con la mayor caldera de biomasa de Catalunya

La papelera Alier de Rosselló ha estrenado la mayor caldera de biomasa de Catalunya, una instalación que ha conllevado la creación de veinte empleos directos y hasta 200 indirectos. Ha supuesto una inversión de 28 millones de euros, de los cuales seis millones proceden de una subvención de los fondos Next Generation de la UE, a través del Institut Català de l’Energia (Icaen).

Esta instalación de biomasa permitirá reducir en un 98% las emisiones de CO2 en el proceso productivo de la compañía y evitará el consumo de gas natural como combustible para obtener calor y vapor y generar electricidad en motores de cogeneración. Elisabet Alier, presidenta de la empresa, explicó que “tenemos un plan de descarbonización y decidimos sustituir el anterior sistema de cogeneración de alta eficiencia para transicionar hacia la biomasa, un combustible de origen renovable, para salir así del uso que hacíamos hasta ahora de combustibles fósiles”.

Alier añadió que esta instalación emplea como combustible biomasa forestal “procedente del sotobosque y de las copas de los árboles”, con lo que favorece la limpieza de las áreas forestales de su entorno. “La transición que hacemos demuestra que esta energía tiene unos beneficios mediambientales, y a nivel económico también supone un coste inferior”, recalcó la presidenta de la papelera, y apuntó que en zonas de la Catalunya rural “también se verán favorecidos con este cambio en nuestra empresa”, puesto que “repercute en el cuidado de los bosques”. La caldera de biomasa deberá consumir 60.000 toneladas de masa forestal al año y se ha instalado con el apoyo de Engie Solutions.

Por su parte, la presidenta de la papelera mostró las nuevas instalaciones de biomasa a la directora del Icaen, Marta Morera, quien afirmó que “debemos aprovechar el potencial energético de la biomasa para mejorar la gestión de la masa forestal del país, y esta caldera de Alier es un buen ejemplo para ello nivel de Catalunya y europeo”. Alier es una firma centenaria que se constituyó en 1832 e inició la producción de papel en 1886. Cerró 2022 con una facturación de 196 millones y una plantilla de más de 230 empleados.