El buen tiempo despierta los frutales del Baix Segre

Los campos de frutales de La Granja d’Escarp, en el Baix Segre, empieza a teñirse de tonos rosados y blancos con la floración de los nectarinos más tempranos. A inicios de marzo se espera el estallido floral definitivo, un espectáculo natural que anticipa la primavera. Sin embargo, los agricultores temen las heladas. “Es un mes peligroso”, advierte Francisco Vallés, payés local. Para proteger las cosechas, muchos han instalado microaspersores contra el frío. “Esperamos no tener que usarlos”, añade. Mientras tanto, el Baix Segre se prepara para recibir a visitantes y amantes de la fotografía, que cada año se acercan a la zona para disfrutar del maravilloso espectáculo natural de la floración. Un fenómeno efímero que anticipa la llegada de la primavera y que es un orgullo para los agricultores de la zona.