Descubrir Torà a lomos de un caballo
Jinetes de la Associació de Marxes a Cavall de Catalunya recorrieron el pasado fin de semana el municipio. El histórico Hostal Jaumet tiene un espacio para que estos animales pernocten

Veinticinco jinetes recorrieron el pasado fin de semana el municipio de Torà - C.MARSIÑACH
Veinticinco personas descubieron Torà y sus alrededores el pasado fin de semana desde una perspectiva poco habitual hoy en día: desde la silla de un caballo. Eran miembros de la Associació de Marxes a Cavall de Catalunya (AMAC), que cada mes organiza una salida. Algunos llegaron el viernes y pasaron la noche en el Hostal Jaumet de Torà, donde antiguamente había cuadras para los animales y había sido un punto de parada y fonda para los arrieros. El sábado recorrieron unos 25 kilómetros hasta la zona de Vallferosa y el domingo siguieron el itinerario de La Petja, de 23 kilómetros hasta el monasterio de Cellers. Según la leyenda, cuando Sant Celdoni y Sant Ermenter se vieron acorralados por sus perseguidores, saltaron con sus caballos desde la Serra de Claret hasta la de Cellers y sus huellas quedaron marcadas en la roca.
El presidente de la AMAC, Joan Pi, afirmó que el Solsonès “es una comarca muy apta para ir a caballo, tiene mucha extensión y apenas hay motos o bicicletas”. En este sentido, apuntó que para hacer rutas por territorios como Torà es imprescindible que los caballos sean “muy tranquilos y estén centrados y serenos”. “Que no se asusten fácilmente con algún tractor, con otros animales o que no les dé miedo cruzar un río”, explicó Pi. La AMAC celebra este año su 40 aniversario y cuenta con 230 socios de toda Catalunya. Según su presidente, una tercera parte proceden de las comarcas de Lleida.
Desde la entidad reconocen que no es fácil encontrar alojamientos para dormir con los caballos, por ello, muchas veces pernoctan en casas de colonias, refugios o casas rurales y los animales pasan la noche en bosques. Toni Badia, miembro de la asociación y vecino de Mollerussa, fue el encargado de programar todo el fin de semana en Torà. “Es una zona poco conocida, porque es muy de paso”, valoró. Precisamente por ello, Jaume Marimon, que regenta el Hostal Jaumet de Torà, les hizo de guía en un recorrido por el pueblo.
Coincidiendo con su 135 aniversario, el Hostal Jaumet de Torà quiere recuperar la parada y fonda para visitantes que llegan al pueblo a caballo. “Antes, las distancias se medían en kilómetros y ahora en tiempo. Años atrás, los arrieros debían hacer parada y fonda en algún lugar porque eran trayectos muy largos”, explicó Marimon. Las cuadras del establecimiento habían llegado a alojar más de un centenar de animales. También han adecuado algunos espacios para posicionarse como un alojamiento especializado para motoristas y ciclistas.
“La Segarra y el Solsonès son comarcas desconocidas para muchas personas, y ofreciendo este servicio queremos dejar de ser un lugar de paso. En lugar de eso, queremos que vengan expresamente y se detengan a conocer la Catalunya interior”, concluyó Marimon.