La Seu estrena residencia para presos de tercer grado

El departamento de Justicia ha adecuado una residencia mixta para diez presos internos en régimen abierto en La Seu. Proceden en su mayoría del Centre Penitenciari Ponent, aunque los hay de otros penales de Catalunya. Las dependencias, que pueden ser utilizadas tanto por hombres como por mujeres, se estrenaron a principios del pasado mes de abril y se suma a otras dos residencias que se acaban de abrir en Martorell y Terrassa. Se trata de pisos situados fuera del ámbito de los centros penitenciarios, en viviendas ordinarias, sin ningún tipo de distinción externa y sin funcionarios de prisiones. Los gestionan de forma conjunta entre Justicia varias entidades. En el caso del de La Seu, lo hace la Fundació Privada Sant Antoni Abat. Personal de la entidad pasa la noche con los internos y durante el día les da apoyo para que se formen, busquen trabajo, trabajen y utilicen los recursos sociales.

A estos equipamientos pueden acceder personas en tercer grado, con un riesgo bajo de reincidencia y una buena evolución, para continuar el programa de intervención socio educativa y el itinerario integral de reinserción. Las tres nuevas residencias tienen capacidad para acoger 46 personas en semi libertad y han tenido un coste de 390.782 euros, 114.891 euros de los cuales lo ha aportado el Fondo Social Europeo en concepto de personal. Actualmente, la red de recursos asistenciales del Govern cuenta con 17 residencias distribuidas por todo el territorio catalán. Tiene una capacidad de 361 plazas: 216 de pernoctación y 145 más para seguimientos. Un 2,4 % de las personas clasificadas en tercer grado cumple el tramos final de la condena en residencias fuera del entorno penitenciario como estas. Con las nuevas unidades, los internos podrán cumplir la pena cerca de sus casas, allí donde tienen más vinculación social. La residencia del Baix Llobregat dispone de 18 plazas para hombres y mujeres, en cambio la del Vallès Occidental, con 18 plazas, es exclusiva para hombres.