LA SEU
La tradición vuelve a reinar
Los participantes que intervendrán el domingo en el Ball Cerdà empezaron ayer los ensayos para preparar el tradicional baile, declarado el 2016 como elemento festivo patrimonial de interés nacional
Cada año se inscriben más de cien parejas entre jóvenes y adultos.
La Plaza Patalín de La Seu se volverá a llenar este domingo para celebrar el Ball Cerdà durante la Festa Mayor. Más de un centenar de parejas, entre jóvenes y adultos, se vestirán con sus mejores galas para representar esta danza, declarada en el 2016 como elemento festivo patrimonial de interés nacional por el Govern de la Generalitat. Su elegancia y su antigüedad son motivo cada año de una gran puesta en escena que requiere que todos los participantes tomen parte de los ensayos durante la semana previa. Ayer comenzaron las sesiones para recordar las principales peculiaridades de la danza. Unas sesiones que se alargan toda la semana y en la que los más pequeños, hasta 8 años, son los primeros. A las 19 horas es el turno de los jóvenes, de entre 9 y 15 años y a partir de las 20 horas ensayan los adultos mayores de 16 años. Las sesiones se hacen cada tarde en el patio del colegio Pau Claris de la ciudad y la organización pide que, como mínimo, los bailarines participen un mínimo de dos días para poder participar el domingo, sobretodo aquellos de menor edad. También es imprescindible acudir al ensayo del viernes.
Los orígenes del Ball Cerdà, una variante del Ball Pla, son inciertos. La primera referencia escrita conocida de esta danza típica de La Seu se encuentra en La Vanguardia del día 5 de septiembre del 1916. Por fuentes orales se tiene conocimiento de que se había interpretado en el siglo XIX. Durante el siglo XX se interrumpió por la Guerra Civil y la posguerra. En la década del 1960 y 1970 vivió momentos críticos por falta de participantes. A principios de los años 1980 la cifra de bailadores creció y el interés fue en alza hasta la actualidad.