La detenida por el crimen de Coll de Nargó habría drogado con pastillas a su hija

La vecina de Sant Julià de Lòria acusada de matar a su hija en Coll de Nargó podría haber suministrado pastillas –sedantes– a la niña, de seis años. Esta la principal hipótesis con la que trabaja la División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos d’Esquadra de la Región Policial del Alt Pirineu y Aran según apuntaron ayer fuentes solventes. La madre, señalan las fuentes habría ingerido asimismo sedantes para acabar con la vida de las dos. Cabe recordar que la menor no presentaba signos externos de violencia, como informó ayer SEGRE. La policía catalana informó que la mujer pasará presumiblement hoy a disposición judicial en el juzgado de la capital del Alt Urgell.

Fuentes del Principat cercanas a este caso explicaron que la desaparición de la mujer y la menor de edad, denunciada a los Mossos el viernes, fue considerada de una “desaparición de riesgo” al estar pasando la progenitora por un mal momento a nivel psicológico. Añadieron que precisamente los problemas de trastorno mental que padecía la mujer habían hecho que la guardia y custodia de la pequeña la tuviera la abuela materna.

La menor fue localizada en un torrente situado junto a una granja abandonada próxima a la escuela

La menor fue localizada en un torrente próximo a una granja abandonada conocida como Cal Magí, cercana a la zona del depósito de agua de Coll de Nargó, encima de las escuelas y del museo Dinosfera. La mujer no tenía relación alguna con ningún vecino de este municipio del Alt Urgell. El alcalde, Martí Riera, explicó que “escogió Coll de Nargó como podía haber escogido otro pueblo cercano”. El edil explicó que “los vecinos están consternados por lo sucedido” y lamentó “no haber podido llegar a tiempo para salvar a la pequeña”. La alerta sobre la presencia de la mujer la dieron los responsables del Hotel Betriu del municipio. Explicaron que entró a comprar dos botellas de agua y a pedir información sobre el autobús que iba hacia Organyà.

En Sant Julià de Lòria continuaba habiendo ayer una fuerte conmoción. El Comú decretó una jornada de duelo parroquial por la muerte de la menor. Se suspendieron todas las actividades públicas, entre ellas, la de la elección de los representantes del consejo infantil para el comú y una conferencia sobre jóvenes promesas internacionales. La pequeña formaba parte de la coral Rocafort de Sant Julià, que ayer comunicó que también ha suspendido el próximo concierto.

En la escuela donde la pequeña cursaba segundo de Primaria, los alumnos recibieron la ayuda de un grupo de psicólogos coordinados entre el ministerio de Educación y el área de Salud Mental del Servicio Andorrano de Atención Sanitaria.