BELLMUNT D’URGELL
Obras urgentes en la iglesia ante daños por humedad
Trabajos para consolidar la estructura del campanario y acabar con las filtraciones de agua
El objetivo es frenar la degradación de la cubierta
Bellmunt d’Urgell quiere proteger la iglesia de Sant Josep, declarada bien cultural de interés nacional (BCIN) desde 2021, y actuará de urgencia al constatar que sufre daños por humedad. El consistorio prevé rehabilitar la cubierta del templo, donde ha detectado filtraciones. Estas provocan goteras en el interior, que afectan a los muros estructurales, según explicó la alcaldesa, Cristina Teixidó. Añadió que los daños no revisten peligro pero es necesario intervenir de urgencia para frenar la degradación. Las obras supondrán una primera inversión de 86.347 euros que sufragarán entre el ayuntamiento, una subvención del departamento de Cultura y el obispado de Urgell, titular del templo. La alcaldesa explicó que el consistorio llegó a un acuerdo con la diócesis para financiar parte de las obras ya que el edificio es de titularidad privada y su uso es para los vecinos de Bellmunt.
El consistorio prevé sacar a concurso las obras a partir de la próxima semana, y confía que las tareas no interfieran en el normal desarrollo de los oficios religiosos. Según Teixidó, una vez se finalice esta actuación, están previstas otras para poner en valor el templo y su entorno. Añadió que las distintas subvenciones futuras del departamento de Cultura irán destinadas al entorno de la iglesia y al propio templo. “Es patrimonio cultural del pueblo que debemos poner en valor y proteger”, dijo. Hace dos años, el consistorio derribó la antigua rectoría, al lado de la iglesia, que estaba en ruina técnica y en la que ya se habían registrado desprendimientos del tejado. El objetivo es abrir una calle y habilitar un paso que comunique las calles Major y Calvari, y a la vez dar acceso al patio posterior del templo, además de potenciar la conservación y la visualización de la zona de Sant Josep. La iglesia parroquial de Sant Josep se incluye en la categoría de Monumento Histórico. El principal aspecto de interés del monumento, y que motivó su declaración como BCIN, fueron sus valores históricos, arquitectónicos, artísticos y culturales. El templo, además de servir para el culto, es también una muestra de la evolución histórica y urbana de la localidad. Está situada en el punto más alto de la calle Major y fue construido en el siglo XVII.