El tramo monitorizado de la carretera de Sant Esteve de la Sarga cuesta al Ayuntamiento unos 8.000 euros el año

El Ayuntamiento de Sant Esteve de la Sarga, en el Pallars Jussà, hace unos dos años que tiene instalados un sistema para monitorizar un tramo de doscientos metros de la carretera LV-9124 por seguridad. Se encuentra junto al pueblo de Alzina y una señal de tráfico indica en la entrada y la salida del tramo que "Si suena una señal, no pasáis por el tramo". El alcalde de Sant Esteve de la Sarga, Jordi Navarra, ha explicado que un estudio geológico los alertó de que la montaña sufre "un peligro inminente de caer" y por este motivo decidieron instalar este sistema que si nota "movimientos extraños" avisa. Este servicio le supone al Ayuntamiento unos 8.000 euros anuales.

El alcalde ha explicado que es dinero para un municipio tan pequeño, pero que da "tranquilidad y seguridad" a los usuarios de la carretera. Navarro ha dicho que es consciente de que no supone el 100% de seguridad, pero que si este sistema tiene que servir para evitar un accidente o desgracia ya es muy importante.

La carretera local LV-9124 tiene su punto de inicio en la C-13 y su final en el cruce de la zona urbana de núcleo de Moror. La vía cuenta con una longitud de 7.560 metros y soporta un tráfico de 238 vehículos/día (en un punto anterior al núcleo de Guàrdia de Noguera), de los cuales 7 son vehículos pesados de acuerdo con los datos del último plan de aforos publicado, el año 2019.

Jordi Navarra ha recordado que la situación de las carreteras del municipio "no es muy buena" y ha pedido más inversión para mejorarla. A modo de ejemplo ha explicado que para los tramos de carretera municipal, unos 40 km, disponen de unos 25.000 euros del Plan de caminos, y ha dicho que reparar el firme de un solo kilómetro supone una inversión de unos 50.000 euros. "Invertir en la carretera nos impide hacer cualquier otra inversión en obra nueva en el municipio", ha comentado Navarra.