REIVINDICACIONES LABORALES
La plantilla de hoteles y cafeterías de las estaciones de Port Ainé y Espot se manifiestan para reclamar mejoras laborales
Los trabajadores piden a la empresa que ponga un servicio de transporte hasta la estación y un reconocimiento de categorías
Les plantillas de los hoteles y cafeterías de las estaciones de esquí de Port Ainé, Espot y Boí Taüll, unas 130 personas, han hecho este viernes el primer día de huelga para reclamar mejoras laborales. La principal reclamación es que la empresa Aramark los dote de un servicio de transporte que los lleve hasta la estación. Este es un servicio que hace años tenían y se perdió. Los trabajadores argumentan que haciendo este trayecto con su vehículo particular están perdiendo mucho dinero. Entre las reclamaciones de los trabajadores también está el reconocimiento de las categorías laborales que ocupan y vestimenta adecuada para el lugar donde trabajan. Los trabajadores de Port Ainé y Espot se han manifestado en la carretera de Port Ainé donde han efectuado cortes intermitentes.
La huelga la ha seguido un 95% de la plantilla, según Carmel Valls de UGT, y la afectación a los usuarios ha sido poca, dado que al ser un día laborable no ha sido mucha la gente que ha subido a esquiar a las pistas. El sábado está convocada una segunda jornada de huelga y al ser el fin de semana las retenciones para acceder a la estación se espera que sean mayores.
Los manifestantes de Espot y Port Ainé se han reunido todos en el cruce de Roní, a 14 km de la estación de Port Ainé. Los manifestantes detenían el paso de vehículos de forma intermitente y les informaban con rótulos de sus reclamaciones.
Desde Aramark han manifestado "el total respeto por el derecho a huelga de los trabajadores". Sin embargo, han lamentado las molestias que pueda causar esta situación. Actualmente, existe una negociación abierta con los trabajadores y la voluntad es llegar a un acuerdo satisfactorio por ambas partes a fin de que la situación se resuelva lo antes posible.
Desde los sindicatos CCOO y UGT han dicho que confían en que el lunes la empresa se ponga en contacto con ellos para resolver la situación.
Carme Valls, responsable del sector colectividades UGT Terres de Lleida, ha dicho que llevan unos nueve años realizando estas reivindicaciones que no se han tenido en cuenta, de ahí la huelga de este viernes y sábado. Valls ha explicado que los trabajadores llevan trece años subiendo a las estaciones con vehículos particulares. Valls ha argumentado que cobrando poco más del salario mínimo interprofesional, muchos no pueden permitirse pagar la gasolina que les supone hacer el trayecto para ir a trabajar y ha cuantificado que se pueden llegar a gastar entre 300 y 400 euros solo en carburante. Mientras no llegue un transporte que suba y baje a los trabajadores piden una bonificación o plus de transporte dentro de la nómina.
Si no se llega con un acuerdo con la empresa, la plantilla de trabajadores se plantea volver a convocar huelga para la semana de Carnaval.
En cuanto a la revisión de categorías laborales, Valls ha explicado que la empresa ha dicho que "lo hará" y confían en que sea pronto.
Renata Braz de CCOO, se ha expresado en la misma línea y ha reclamado el transporte dado que el coste para los trabajadores, con "sueldos justos", es muy elevado. Braz también reclamó que los uniformes por los trabajadores sean acordes con la meteorología de la zona donde están trabajando. Braz ha sentenciado que "son ya muchos años" reclamando lo mismo y si la empresa no se aviene a negociar, seguirán con más convocatorias de huelga.