SEGARRA
Un 42% de los jóvenes de la Segarra ha sufrido ansiedad debido a la presión estética
La Oficina Jove de la Segarra ha llevado a cabo una encuesta sobre la imagen física en la que han participado 836 personas. Alumnos de 12 a 16 años de los cuatro institutos de la comarca
¿Y si hablamos de presión estética? Un 42% de los jóvenes de la comarca han experimentado en alguna ocasión ansiedad relacionada con su imagen corporal y un 12% no se gustan cuando se miran al espejo. Son datos de las encuestas realizadas por la Oficina Jove de la Segarra a 836 jóvenes de entre 12 y 16 años de los cuatro centros de Secundaria de la comarca: el Institut Antoni Torroja, Institut La Segarra, Institut Guissona y Fedac Guissona.
Según el estudio, un 10% de los alumnos experimentan frecuentemente ansiedad relacionada con su imagen y un 16% se sienten incentivados a cambiar la apariencia física para gustar a los demás. En este sentido, los resultados de la encuesta ponen de manifiesto que un 35% se sienten influenciados por las redes sociales.
El martes se organizó un taller para dar herramientas a las familias para combatir la presión estética
Desde la Mesa de Salud de la comarca detectaron la necesidad de trabajar sobre la presión estética en los adolescentes, pero no tenían datos para evidenciar esta realidad.
Por ello, este verano en los campos de trabajo locales impulsados por Oficina Jove de la Segarra con los jóvenes de la comarca se organizaron talleres sobre autoestima y presión estética impartidos por los referentes de Bienestar Emocional y Comunitario de los CAP de Cervera y Guissona. Los adolescentes crearon una campaña de sensibilización sobre la presión estética con el lema Estimem la diversitat: la Segarra jove diu no a la pressió estètica, pintando banderolas con frases y dibujos que recorrieron distintas fiestas mayores.
Ahora, con los datos en la mano, Anna Gomà, coordinadora y técnica comarcal de la Oficina Jove, asegura que pueden entender mejor su realidad y seguir planteando acciones para combatir esta problemática. Este martes, por ejemplo, se organizó una charla sobre cómo las familias pueden compensar la presión estética en adolescentes y jóvenes en casa. El taller fue impartido por Magranes Cooperativa en Tarroja de Segarra.
Desde la entidad pusieron de manifiesto que la presión estética es “una forma de opresión social” que impone unos cánones de belleza. Por ello, señalaron la importancia que tienen las familias como referentes de sus hijos. Para combatir la presión estética recomendaron evitar opinar sobre los cuerpos de los demás y poner en evidencia los comentarios ofensivos contra el aspecto físico para cortar la cadena de trasmisión. También recordaron que todos los cuerpos son válidos y defendieron que hay que “normalizar la diversidad que nos hace únicos”.
Las familias agradecieron este espacio de reflexión y debate en que pudieron compartir sus experiencias e inquietudes. Aunque no haya una fórmula mágica para combatir la presión estética desde casa hablar de ello les resultó terapéutico y tomaron conciencia de la importancia de hablar y escuchar a los jóvenes validando sus emociones respecto a su cuerpo.