El Canal d'Urgell legaliza 70 pozos perforados en la zona regable para afrontar la sequía

El Canal d’Urgell está tramitando actualmente la legalización de 70 pozos de agua perforados para afrontar la profunda sequía que ha afectado durante la última campaña especialmente a esta zona regable. Son las solicitudes que ha recibido la comunidad de regantes este año y que previsiblemente aprobará y trasladará a la Confederación Hidrográfica del Ebro para que las incluya en el registro de aguas. Fuentes consultadas por este diario indicaron que algunos de los pozos ya se habían activado con anterioridad, pero se regularizan ahora ante la necesidad de acceder a todos los recursos disponibles de agua.

Durante la primavera y el verano fueron numerosos los regantes que contrataron empresas para excavar el subsuelo en busca de acuíferos. De hecho, en la sequía de 2008 ya se disparó el número de solicitudes para captar aguas subterráneas. La comunidad de regantes es la titular de la concesión de agua tanto superficial como soterrada, por lo que es la que puede dar la autorización. La CHE lo ha recordado en los últimos meses y ha alertado asimismo de que las sequías prolongadas como la actual suelen agotar el agua del subsuelo. El plan de sequía, recordaron fuentes del canal, contempla que se pueda acudir a recursos paralelos como este en situación de emergencia y excepcionalidad.Precisamente, para afrontar la sequía de cara a la próxima campaña y ante la persistente falta de lluvias la junta de gobierno del canal acordó ayer llevar adelante un revolucionario sistema de reparto del agua en base a los ‘hidros’, nombre con el que ha bautizado las unidades de riego con las que contarán los regantes. Se trata de distribuir el agua por hectárea, sin tener en cuenta el cultivo, de modo que el sistema asigna un número de riegos por superficie en función de las reservas útiles de los pantanos de Oliana y Rialb. El canal calculará los riegos disponibles y también los no asegurados (calculados sobre estadísticas de aportaciones de agua al río Segre). Por ejemplo, un turno de riego equivale a unos 60 hectómetros en el canal principal (50.000 hectáreas), que es la zona donde se aplicará el nuevo sistema de reparto. Un ‘hidro’ equivaldrá a 1.250 metros cúbicos por hectárea y al inicio de la campaña cada regante sabrá cuántos ‘hidros’ tiene disponibles para cada finca.La cifra irá variando a tenor de la evolución de las reservas. El sistema contempla también que los ‘hidros’ se puedan ceder entre fincas de la misma explotación o de distintas explotaciones de una misma colectividad, salvo si el agua procede de un pozo. La comunidad de regantes desarrollará un sistema informático para que el personal de las colectividades pueda gestionar el nuevo modelo.

Las colectividades controlarán agua y cultivos

El nuevo modelo de distribución del agua del Canal d’Urgell tiene como objetivo no dejar ninguna parcela sin riego, como ha ocurrido durante la pasada temporada, en que un 80% de las hectáreas se quedaron sin agua y solo 9.000 hectáreas de frutales del principal accedieron al regadío. El sistema de ‘hidros’ da a las 20 colectividades capacidad de control y gestión tanto del agua como de los cultivos. Según la comunidad de regantes, las colectividades validarán las cesiones de agua si las hay y también podrán denegarlas si hay dificultades en el transporte del recurso. También podrán adoptar limitaciones de la distribución de cultivos en su zona y registrarán diariamente las subparcelas que rieguen en cada turno.La comunidad de regantes desarrollará ahora un programa para gestionar el nuevo modelo desde las colectividades y desarrollará una aplicación para registrar pedidos, cesiones de agua, contar ‘hidros’ consumidos, disponibles o restantes. Tras la reunión ayer de la junta de gobierno, ahora se trasladará la información del modelo a los síndicos, a los vigilantes y a todos los regantes.