INFRAESTRUCTURAS HIDRÁULICAS
El Aragón y Catalunya adelanta el cierre de la campaña al romperse el canal
Filtraciones en la solera del Principal en Fonz que se repararán durante este invierno
Las máquinas trabajando en la zona donde se detectó la rotura en el principal del Aragón y Catalunya. - CAYC
Una rotura en el kilómetro 21 del canal principal del Aragón y Catalunya a su paso por la localidad oscense de Fonz adelantó el cierre de la campaña de riegos a las 24 horas de ayer viernes. Estaba previsto que acabara el domingo tras racionamientos extremos durante toda la temporada mediante prorrateos que se revisaban y, en muchos casos reducían, cada 15 días para lograr que todos los payeses tuvieran agua. Según el presidente de la comunidad de regantes, José Luís Pérez, la rotura se detectó en la noche del jueves tras comprobarse que había filtraciones en la solera de la conducción. Ahora se tendrá que localizar la avería y consolidar la parte afectada del canal. Las máquinas ya están en la zona y las obras se prolongarán durante todo el invierno para que quede restablecida la circulación del agua en marzo de 2024. No obstante, se soltará un caudal mínimo cada 20 días para el abastecimiento de municipios e industrias y regar cultivos tempranos, indicó Pérez.
Finaliza así una de las campañas más complicadas de la comunidad de regantes que suministra desde el pantano de Barasona su parte alta y del Noguera Ribagorçana la baja, que también se nutre del embalse de cola de San Salvador, que cuenta con 80 hectómetros cúbicos y está la 53,8%. En la actualidad, Barasona se encuentra al 14,3% de su capacidad con solo 12,15 hectómetros cúbicos cuando a finales de junio llego a estar al 100% por la avenida del Ésera; mientras, el Ribagorçana está a punto de entrar en situación de emergencia, según el último balance de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). Los pantanos de esta cuenca (Cavallers, Baserca, Escales, Canelles y Santa Ana) sumaban ayer 238,8 hectómetros cúbicos cuando hace 10 días acumulaban 270,74. Santa Ana ya está por debajo de la media de su capacidad con 116 hectómetros cúbicos y Canelles sigue perdiendo reservas, al 12,5%. Según los técnicos, serán precisos dos o tres años de lluvias abundantes para que vuelvan a recuperarse a niveles normales.
