AGUAS REGADÍOS
El Govern condiciona modernizar el Urgell a que los regantes se adhieran y paguen obras
El conseller de Acció Climática, David Mascort, confía en que se conseguirá acordar una fórmula para financiarlas
Inaugura la supresión del riego a manta de 1.300 hectáreas de L'Horta de Lleida
“La adhesión de los regantes a la financiación de las obras es imprescindible para comenzar la modernización del Canal d’Urgell”. Así lo aseguró ayer en Lleida el conseller de Acción Climática, David Mascort. Se mostró convencido de que “encontraremos la fórmula” para sufragar esta intervención, al considerar que ha habido un cambio de mentalidad a raíz del cierre del canal principal por la sequía y las dificultades para regar este verano.
Mascort recordó que ya hay 4 proyectos redactados y listos para intervenir en las primeras 11.657 hectáreas y una partida de 138 millones pendientes de un acuerdo. La reunión entre conselleria y Casa Canal para fijar los porcentajes que aportará cada una está prevista para finales de este mes o primeros de noviembre. Mascort indicó que volverán a plantear la participación del Estado cuando haya un Gobierno “que no esté en funciones”. No obstante, el ministerio de Agricultura ha iniciado los trámites para impulsar la construcción de tres grandes balsas, sistemas de automatización y revestimientos, para comenzar obras en 2024 que costarán 35 millones de los Next Generation. Modernizar las más de 70.000 hectáreas del Canal d’Urgell costará más de 1.200 millones de euros.El conseller inauguró la primera fase de modernización de L’Horta de Lleida, que beneficia a 1.297 hectáreas de las partidas de Rufea, Butsènit, La Caparrella y Torres de Saniu, ya en funcionamiento. Ha supuesto una inversión de casi 10 millones, de los que la Generalitat ha aportado 6 y los regantes 4. Se han instalado más de 54 kilómetros de tuberías para habilitar una red de riego presurizada con sistemas de telecontrol que lleva el agua a 426 parcelas mediante goteo o aspersión. El presidente de la Junta de Sequiatge, Joan Antoni Boldú, celebró la implantación de este sistema, “en el que hemos estado trabajando durante décadas”. Su implantación comporta un ahorro de agua de casi el 40% respecto el riego a manta. La Horta de Lleida tiene una extensión de casi 5.000 hectáreas y ahora se trabaja en una segunda fase que comportará la modernización de otras 2.000.
“Hay buena predisposición pero habrá que concretar”
El presidente de la comunidad de regantes del Canal d’Urgell, Amadeu Ros, indicó que “hay buena predisposición a pagar, pero habrá que concretar cantidades. Escucharemos las propuestas, aunque han de ser viables”. Ros añadió que se han de tener en cuenta las peculiaridades del Canal d’Urgell, un riego histórico que tiene una estructura singular diferente a cualquier otro nuevo regadío. “Se tiene que considerar que abastece a más de un centenar de poblaciones y que de él dependen una gran cantidad de empresas, por lo que la planficación debe ser minuciosa y respetuosa con los regantes, que ya han hecho inversiones y mejoras”.
Reunión de colectividades sobre el nuevo plan de riego
Diversas colectividades del Canal d’Urgell están llevando a cabo estos días reuniones para debatir el nuevo plan de distribución del riego, que se pondrá en marcha la próxima campaña con la finalidad de que todos los cultivos dispongan de agua y no se produzcan situaciones como la de este año, en la que solo se abasteció a los frutales, primero para salvar los árboles y luego la producción. En cambio, las fincas del cereal y otros herbáceos quedaron a expensas de las ayudas de la Generalitat. El conseller David Mascort indicó ayer que se está en fase de estudio de las alegaciones. Añadió que las subvenciones se harán públicas a primeros de noviembre y se abonarán a principios de 2024.