METEOROLOGÍA BORRASCA CIARÁN
Las estaciones de esquí trabajan para abrir las pistas en tres semanas
El temporal deja hasta 15 centímetros de nieve en las cotas altas de Boí-Taüll
El pantano de Escales gana casi 9 hectómetros cúbicos de agua en solo dos días
Las estaciones de esquí del Pirineo se preparan para abrir la temporada de invierno en tres semanas. La borrasca Ciarán ha dejado espesores de hasta 15 centímetros en cotas altas de las pistas de Boí Ta-üll y las bajas temperaturas han permitido a dominios como Baqueira encender los cañones de nieve. Fuentes de la estación aranesa explicaron ayer que la previsión es estrenar la campaña el próximo 25 de noviembre, siempre que las condiciones lo permitan. Por su parte, desde Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC, titular en Lleida de Boí Taüll, Port Ainé y Espot) señalaron que esperan abrir entre el último fin de semana de este mes y principios de diciembre.
Las temperaturas siguieron descendiendo ayer y las más bajas de Catalunya se registraron en Boí, con 8,4 grados bajo cero, y en Salòria, en el Pallars Sobirà, con 7,8 grados negativos. En el llano, el descenso térmico también fue notable. En Cervera y Mollerusa los termómetros llegaron a marcar 3,5 grados de mínima, cuando el jueves se situaron en 7,1 y 9,6 respectivamente. En Lleida ciudad la temperatura bajó hasta los 5,1 grados. Las precipitaciones, que el jueves alcanzaron los 100 litros por metro cuadrado en La Torre de Capdella, remitieron ayer y los mayores registros en Lleida fueron los 4,2 litros por metro cuadrado de Certascan, en el Pallars Sobirà, y 2,3 en Sasseuva, en la Val d’Aran. Mientras, las fuertes rachas de viento se mantuvieron y la máxima en la provincia alcanzó los 95,8 kilómetros por hora en Espot y los 80,3 en Alguaire. Las intensas lluvias del jueves provocaron un aumento del caudal de los ríos (ver SEGRE de ayer). En este sentido, el Valira a su paso por La Seu transportaba ayer a mediodía casi 18 metros cúbicos por segundo frente a los 1,72 de la madrugada del miércoles al jueves. Por su parte, el Flamisell rondaba los 10 metros cúbicos. Además, las últimas precipitaciones ya se han empezado a notar en los pantanos. Es el caso de Escales, en el Noguera Ribagorçana, que ganó unos 9 hectómetros cúbicos de agua entre el jueves y ayer y se encuentra al 61,37% de su capacidad. El embalse de Oliana, en el Segre, sumó otros 2,6 hectómetros y está por encima del 37%. El aumento en Rialb fue sensiblemente inferior y ha ganado un hectómetro. Por su parte, los Bomberos de la Generalitat retiraron de nuevo varios árboles caídos debido al viento. Hicieron intervenciones en la carretera LP-9132 en Vilanova de Meià, Bellpuig y Claravalls y también revisaron la fachada de un inmueble en Balaguer. El teléfono de emergencias 112 recibió cerca de mil llamadas por desperfectos causados por el viento en toda Catalunya.