MEMORIA GUERRA CIVIL
Uso de georradares e inteligencia artificial en la localización de fosas
Memòria Democràtica ya usó esta máquina para hallar y exhumar restos el pasado verano en Bovera
La próxima intervención será en diciembre en este municipio
La conselleria de Justicia, a través de la dirección general de Memòria Democrática, está probando nuevas técnicas innovadoras como el uso de georradares y de inteligencia artificial para la búsqueda e identificación de fosas comunes de la Guerra Civil y trabaja para saber si en un futuro es posible que esta innovación permita la localización de restos óseos. El uso de georradares se probó por primera vez el año pasado en la exhumación de la fosa de Canturri, en el Alt Urgell, donde se localizaron 12 cuerpos de soldados republicanos heridos en el frente del Pallars.
Ante el éxito, el uso de este aparato se ha extendido este año a Bovera, donde el pasado verano se localizaron dos fosas. Una en el cementerio y otra en la zona conocida como la Casilla. En total, se exhumaron los restos de 26 soldados republicanos heridos o fusilados entre diciembre de 1938 y enero de 1939.
La próxima actuación en la zona, concretamente en Lo Coll Roig, se llevará a cabo el próximo mes de diciembre, cuando está previsto el inicio de los trabajos de exhumación. Al respecto, Alex Quintana, subdirector general de Memòria Democràtica, explicó ayer a este diario que los trabajos en esta fosa se iniciaron este verano con el uso del georradar para tratar de limitar la zona. En este caso, detalló que se encuentran con el problema de que se trata de un terreno muy húmedo en la zona regable del Garrigues Sud.
Según fuentes orales recogidas, aquí habría restos de unos 15 soldados republicanos que estaban escondidos y que fueron capturados y fusilados por las tropas rebeldes. Según Quintana, el uso de estas nuevas técnicas innovadoras permite “abrir directamente donde sabes que puede haber algo y priorizar”. Asimismo, es un modo de reducir costes para poder invertir este dinero en la apertura de más fosas y otras actuaciones. “Es una tecnología que ya existía pero que no se había utilizado en fosas, y la estamos probando y adaptando para saber qué nos puede aportar. Con el georradar, el proceso de exhumación se acelera, permite reducir costes y ser más eficientes”, destacó.
Asimismo, Memòria Democràtica también ha utilizado, con la colaboración del Centre de Telecomunicacions i Tecnologies del a Información, drones para geolocalizar restos en la zona del Mas de la Pila, en Corbera d’Ebre. Según Quintana, el uso de drones sería útil en superficies más extensas y donde podría haber restos a menos profundidad. También se está trabajando con el Institut de Ciències Fotòniques para afinar qué tipo de cámaras podrían detectar huesos humanos. “Seguiremos apostando por la innovación”, subrayó.