Bernat Solé deja atrás la inhabilitación y descarta volver a la política a corto plazo

Bernat Solé, exdelegado de la Generalitat en Lleida y exalcalde de Agramunt, deja hoy atrás la inhabilitación para ejercer cargos públicos. Quedó apartado de la política activa el 6 de diciembre de 2022, cuando el Tribunal Supremo (TS) ratificó la sentencia que lo inhabilitó durante un año por un delito de desobediencia, al haber participado en el referéndum del 1-O. Volvió a a su profesión como docente y ha trabajado desde entonces como profesor de Secundaria.

Solé afirmó ayer que está “muy implicado en el proyecto educativo” del centro donde trabaja y aseguró que no se plantea volver a la política institucional a corto plazo. Añadió que “la política se puede hacer desde muchos lugares y de muchas formas” y no descartó volver más adelante, “siempre y cuando haya un proyecto que me ilusione”.Tras quedar inhabilitado, el cargo de delegado del Govern en Lleida recayó en Montse Bergés, la primera mujer en ocupar este puesto. Solé fue el segundo alcalde leridano inhabilitado por el procés, después de Miquel Serra, que fue primer edil de Alcarràs hace dos mandatos. Sin embargo, Solé fue el primero que estaba ocupando un cargo público en el momento de ratificarse la sentencia en su contra.