Cultura y gastronomía llenan pueblos de Lleida por el puente más allá del esquí

La gastronomía y la cultura llenan los pueblos de Lleida durante el puente, aunque el esquí sigue siendo la actividad estrella. Los murales de Penelles y los turrones de Agramunt son solo dos ejemplos de las propuestas que atraen a miles de visitantes a la demarcación. Los restaurantes también han colgado el cartel de completo durante estos días festivos.

La cultura y la gastronomía llenan durante este puente los pueblos de Lleida. Más allá del esquí, que es la actividad estrella en invierno, estas dos propuestas son motores turísticos que atraen a miles de visitantes a la demarcación. Ejemplo de ello es Penelles, cuyos murales recibieron ayer a más de 600 turistas. Estas fueron solo las personas que se acercaron al punto de información, a las que habría que añadir las que visitaron la localidad por libre. El alcalde, Eloi Bergós, explicó que desde el miércoles en la población han desembarcado cientos de amantes del arte urbano.

Lleida cuenta también con otros referentes culturales como las iglesias románicas de La Vall de Boí. De hecho, hoy arranca el Any Taüll, que conmemora los 900 años de la consagración de Sant Climent y Santa Maria. Entre las actividades previstas para estos días también destacan las jornadas Memòria de Frontera de Sort, que ayer contaron con una recreación histórica del Escamot Pirinenc, que dependía de la Generalitat y que se formó en el inicio de la Guerra Civil para defender las comarcas de montaña. A nivel gastronómico, productos como el aceite y las ferias del sector actúan como “tractores para atraer visitantes”, según el responsable de Promoción del Patronato de Turismo de la Diputación, Juli Alegre. Otra de las elaboraciones estrella es el turrón y Agramunt recibió a decenas de compradores. Responsables de las diferentes empresas del sector de la localidad coincidieron en que es un “no parar” y la afluencia de compradores ha hecho que en algunas tiendas se generen largas colas. Por su parte, los restaurantes cuentan con un elevado nivel de reservas y el presidente de la Federación de Hostelería, Josep Castellarnau, indicó que “la gran mayoría están llenos”. Es el caso de Casa Kiko de Llessui, que está al completo hasta mañana.En cuanto a la ocupación, Alegre señaló que los hoteles que se encuentran cerca de las pistas de esquí rozan el 100%, así como los bungalows de toda la demarcación. Por su parte, las casas de turismo rural cuentan con hasta el 90% de sus plazas reservadas.