El Garrigues Sud pide compensaciones por dar agua al Priorat y Aragón rechaza trasvasarla

La comunidad de regantes del Garrigues Sud quiere compensaciones de la Generalitat por dar agua desde el pantano de Flix a los regantes de Priorat. Pide agilizar la construcción de plantas solares para bombear agua a las balsas y reducir así los recibos de la luz que ahora se llevan casi todo su presupuesto. Ya tiene una en marcha en Bovera y proyectan dos más en este municipio, otra en Flix y otra en Bellaguarda, actualmente en tramitación. Según su presidente, Xavier Pelegrí, “no hay ningún impedimento en colaborar con los regantes del Priorat, pero con estas mejoras se podrá suministrar agua de mejor calidad, más barata y con garantías para todos”.

El conseller de Acción Climática, David Mascort, anunció el domingo en Falset dos proyectos para abastecer los campos de vid y olivos del Priorat. Uno consiste en conectar la red del Garrigues Sud con el embalse de La Palma de Ebro y, desde allí, impulsar agua al pantano de Margalef, lo que beneficiará a unas 1.400 hectáreas de esa comarca. Estas obras se enmarcan dentro de la cuenca del Ebro. El pasado verano ya se habilitó una conexión provisional con la tubería principal del Garrigues Sud para que pudieran regar unas 500 ha de seis pueblos (ver claves). El otro proyecto consiste en llevar agua del Ebro desde el municipio de Garcia, en la Ribera d’Ebre, hasta el pantano de Siurana. Este sí comportará un travase de la cuenca del Ebro a las cuencas internas de Catalunya. Este anuncio ha puesto en pie de guerra a Aragón, que se opone a cualquier trasvase del Ebro a Catalunya. Así lo manifesto ayer el Gobierno de PP y Vox, pero también el PAR, el PSOE y la CHA, aduciendo que no sobra el agua y el gran el impacto ecológico de trasvasarla.Por su parte, la Confederación Hidrográfica del Ebro remarcó que estas obras tendrán que esperar al nuevo Plan Hidrológico del Ebro, más allá de 2027, ya que el actual (2022-2027) no las contempla. La Generalitat tendrá que solicitar esta intervención para que sea valorada, aunque indicó que no habrá problema para hacer cesiones de emergencia al Pirorat como la que ya se llevó acabo este verano por la sequía.

Los embalses de Mequinensa, Flix y Riba-roja suman nuevas reservas

Las reservas de los embalses del curso medio y bajo del Ebro, Mequinensa y Riba-roja, siguen aumentando por las lluvias en cabecera tanto en el País Vasco como Navarra. El de Mequinensa acumula más de 1.103 hectómetros cúbicos, está al 80,4% y ha sumado otros 26 hectómetros cúbicos respecto a la semana pasada. Riba-roja tiene más de 196 hectómetros cúbicos y está al 93,6% de su capacidad.Ambos, junto con el pantano de Flix, desembalsan por turbinas para mantener un margen de seguridad ante posibles avenidas, indicaron fuentes de la CHE. Por el contrario, los embalses de Guiamets y de Siurana, que abastecen los riegos del Priorat, almecenan medio hectómetro cúbico cada uno. Los regantes de esta comarca solicitan una dotación de 1.229 metros cúbicos por hectárea y año para una decena de municipios con el fin de regar unas 1.588 ha mientras continua la sequía. En las comarcas de Lleida, el Segre continúa en emergencia por vigésimo mes consecutivo y los embalses de Oliana y Rialb rondan los 150 hectómetros cúbicos, lo que garantiza ya dos riegos en el Canal d’Urgell.

Derivar más agua del Pallaresa y ampliar el Segrià Sur, a la espera

Las obras para derivar más agua del Noguera Pallaresa a la cuenca del Segre para garantizar el regadío del toda el área regable del Canal Principal d’Urgell y el Segarra-Garrigues es una cuestión que la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) tampoco se plantea hasta 2027, cuando comience la redacción del nuevo plan hidrológico. Esta es una solución que la comunidad de regantes del Canal d’Urgell plantea desde hace años y una reclamación que, como la de dar agua al Prioral mediante la conexión del Garrigues Sud con el embalse de La Palma d’Ebre, tendrá que esperar tres años, por lo menos, según la CHE.También tendrá que aguardar este periodo de tiempo la ampliación del Segrià Sud con otras 2.000 hectáreas en los municipios de Llardecans y Maials. Mientras, la comunidad de regantes podrá abordar los proyectos que garanticen el control en el almacenamiento de recursos y la racionalización del consumo. La ampliación del riego de apoyo quedó aparcada, ya que la CHE no estaba abierta a dar nuevas dotaciones por el actual marco de sequía en la provincia de Lleida.