Los pioneros del biometano amplían sus instalaciones

Dos proyectos sobre la mesa de la Generalitat prevén ampliar las dos plantas pioneras en Lleida en la producción de biometano: biogás depurado hasta alcanzar un poder calorífico similar al del gas fósil que puede inyectarse en la red de distribución. Son las de Torre Santamaria, en Vallfogona de Balaguer, y la de Porgaporcs, en Vila-sana.

La ampliación de la planta de biometano de Vallfogona de Balaguer se plantea después de que, el año pasado, la empresa Axpo Iberia y el grupo Sorigué adquirieran el 80% de esta instalación, pionera en comercializar este gas de origen renovable. La Generalitat ha declarado estratégico este proyecto de ampliación, que prevé pasar de recibir 70.000 toneladas de deyecciones ganaderas al año a 369.351 toneladas de residuos. De estas, 339.163 será estiércol de la propia granja y de otras explotaciones de su entorno, mientras que las 30.000 restantes serán “lodos higienizados” procedentes de la depuración de aguas. Los promotores, bajo la firma Noguera Renovables SL, pretenden inyectar en la red de una producción energética de hasta 136 gigavatios/hora (GWh) al año.Por su parte, Porgaporcs acogió años atrás experiencias pioneras en depuración del biometano para impulsar vehículos, en el marco de proyectos financiados por la UE. Ahora la empresa plantea ampliar el recinto y pasar de los 60.055 metros cuadrados actuales a 144.052, donde prevé instalar una planta de compostaje, una gasinera para repostar vehículos impulsados por biometano y maquinaria para producirlo a partir del metano que desprende la materia orgánica en descomposición. El objetivo es alcanzar una producción de 26.549 megavatios/hora (MWh) al año y 1.905 toneladas de CO2 licuado para usos industriales.Al margen de estas instalaciones, hay al menos una veintena de proyectos más en Lleida que plantean producir biometano e inyectarlo en la red de gas. Entre ellos destaca la planta prevista en La Sentiu de Sió, la mayor hasta ahora en el sur de Europa.