SUCESOS BALANCE
Las comarcas de Lleida registran dos robos de cobre de media cada día
Los Mossos incrementarán los controles en chatarrerías, al calcular que un 10% colabora con las redes criminales
Resueltos uno de cada diez casos y 28 detenidos
Los Mossos d’Esquadra han contabilizado, desde mayo de 2023 hasta abril de este año, un total de 627 incidencias y 28 detenciones relacionadas con la sustracción de metales, especialmente cobre, en las comarcas de Lleida. Es decir, casi dos casos al día. Se trata de hurtos, robos con fuerza, daños y actos vandálicos, de los que solo se han resuelto un 10,5%. Por regiones policiales, en Ponent se han registrado 610 casos con un 10% de resoluciones (61) mientras que en el Alt Pirineu i Aran han sido 17 con una resolución del 29% (5). En cuanto a los arrestos, se han producido 28 frente a las 40 de mayo de 2022 a abril de 2023. En Catalunya, han habido 5.885 incidentes. Estos datos se dieron a conocer tras la reunión del Programa Operativo Específico (POE) Metall de los Mossos para hacer frente a la sustracción demetales en empresas, obras, infraestructuras críticas y la red ferroviaria. Así, han decidido elevar al nivel 2 sobre 3 su plan de prevención –ya lo estaba en Tarragona y el área metropolitana de Barcelona– e intensificarán las medidas ante el aumento de robos.
El comisario Rafel Comes advirtió de que se trata de “un problema que ha venido para quedarse, es una materia prima crítica de la que hay una gran demanda y el precio se está incrementando” hasta situarse en uno de los valores máximos registrados en los últimos años, a 9,5 euros el kilo. La policía ve clara una “relación causa-efecto entre elevado precio de esta materia y el aumento de robos”, la mayoría en empresas pero con mucha repercusión cuando afectan a infraestructuras ferroviarias. Asimismo, Comes insistió en que, de los 326 gestores de residuos, “la gran mayoría son gente que colabora”, si bien calculan que hay un 10% que tiene connivencia con las redes que roban e incluso han obstaculizado investigaciones al negarse a aportar datos de quién les vendió el metal o impedir una inspección administrativa, algo que les supone una sanción de máximo 600 euros. “Este 10% estarán en nuestro punto de mira y aplicaremos tolerancia cero”. Así, aumentarán las inspecciones. En el 17% de las revisions que han hecho este año han detectado infracciones, la mayoría por irregularidades a la hora de cumplimentar registros obligatorios y omitir las comunicaciones a los Mossos.En cuanto a los ladrones, un 75% tienen antecedentes y el 30% de ellos acumulan más de 10 detenciones. El delito que se le pueden atribuir por llevarse cobre es el hurto –una pena de máximo un año y medio de cárcel–. Forman parte de una red criminal y en cada sustracción participan entre 2 y 4 personas y van cambiando, lo que dificulta la imputación. Así, los Mossos pedirán a la Fiscalía que reclame órdenes de alejamiento para los sospechosos respecto a la red ferroviaria.