TORÀ
La antigua fábrica Furas se convertirá en local cultural
El ayuntamiento adquiere el antiguo complejo industrial, que cerró en 2011
La alcaldesa descarta instalar este equipamiento en el casal parroquial
El ayuntamiento de Torà ha adquirido la antigua fábrica de la empresa Furas y la convertirá en un equipamiento sociocultural. El complejo industrial, dedicado a la fabricación de cableado para coches, cerró sus puertas en 2011. Según la alcaldesa, Isabel Torres, el inmueble tiene una superficie de 4.000 metros cuadrados que se rehabilitará como un espacio polivalente. Dará cabida a actos de las fiestas locales y el carnaval del Brut i la Bruta, acogerá una biblioteca y expondrá los gigantes del municipio.
El pabellón polideportivo junto a la antigua fábrica acoge actualmente estas actividades y celebraciones, si bien la alcaldesa considera que esto “hipoteca la actividad deportiva de la localidad”. Torres ha descartado el proyecto de los anteriores consistorios de habilitar el futuro espacio sociocultural en el antiguo casal parroquial. El municipio lo adquirió en el año 2003 e inviertió en él unos 311.000 euros en 2020 para retirar escombros tras un hundimiento en 2011. Los trabajos en el inmueble dejaron acabada la planta con un nuevo firme.Para la alcaldesa, el casal parroquial “no dispone de espacio suficiente” para el nuevo uso que pretende darle el ayuntamiento, por lo que adquirió la antigua fábrica. La compra es resultado de largas negociaciones con el Incasòl, hasta ahora propietario de la nave. La primera edil declinó revelar por ahora el precio de la compraventa. La empresa Furas, que desde 2007 pasó a ser propiedad de la multinacional alemana Leoni, cerró sus instalaciones en Torà en 2011, tras cuatro décadas en este municipio de la Segarra, donde empleaba a más de 60 trabajadores. Inicialmente se denominaba Recutex. El inmueble está formado por una única nave que ocupa toda la manzana a la entrada de la localidad por la carretera de Ponts. Además de la nave y la planta de oficinas, en su interior también hay dos viviendas. Si bien la estructura del edificio se mantiene en buen estado, hace unos años sufrió el hundimiento de una parte del tejado.Torres añadió que el consistorio está valorando la recuperación del antiguo cuartel de la Guardia Civil, adquirido en 2012 y que tiene una superficie de mil metros cuadrados repartida en seis viviendas.