SEGRE

FAUNA AGRICULTURA

Los conejos arrasan de nuevo cultivos en el llano de Lleida pese a reducirse su población

Los payeses calculan pérdidas de entre el 70 y el 80% en los campos de cereal

Reclaman que se vuelva a declarar la emergencia cinegética que ha permitido eliminar más de 437.000 ejemplares

Pagesos en un camp de Preixana on els conills han arrasat una plantació.

Payeses en un campo de Preixana donde los conejos han arrasado una plantación. - ACN

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Laia Pedrós/Maria Molina

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Muchas fincas sembradas recientemente con colza, trigo y cebada en el llano de Lleida han aparecido arrasadas por los conejos. Han sufrido pérdidas de entre el 70 y el 80%, pese a que su población se ha reducido sensiblemente en los últimos meses. Este descenso se debe al calor del pasado verano, a enfermedades como la mixomatosis y la hemorragia vírica y la aplicación del plan de acción cinegética de la Generalitat, con el que se han eliminado 437.585 ejemplares (ver desglose). La emergencia por plaga de conejos se declaró la pasada primavera y finalizó en septiembre.

“La situación es muy preocupante y tememos que volveremos a tener una campaña desastrosa como la pasada si no se adoptan medidas”, indicó Núria Bacardí, agricultora de Ciutadilla con cultivos también en Verdú y Tàrrega. Bacardí reclamó ayuda de la administración y criticó que no se haya utilizado el fosfuro de aluminio y medidas como la protección de árboles. Reconoció que “se ha cazado muchísimo, incluso con batidas nocturnas, pero no es suficiente”. Ayer visitó fincas de colza y cereal de Preixana devastadas junto con agricultores de esta población, Verdú y Miralcamp, que también se han visto afectados por la plaga de conejos que ya han asolado cereal, viñedos y frutales. Los acompañó Pere Roqué, presidente de Asaja Lleida, que reclamó a la Generalitat que vuelva a declarar la emergencia cinegética y use fosfuro de aluminio para eliminar conejos en las madrigueras que excavan en los taludes de carreteras. Roqué añadió que la huelga de cazadores por la polémica con los perros de caza en septiembre y octubre ha hecho que, en los últimos meses, “haya crecido la fauna salvaje en general, en concreto conejos, corzos y jabalíes”. Roqué indicó que si esta situación continua “se dejarán de sembrar muchas explotaciones”.La declaración de emergencia cinegética para acabar con la sobrepoblación de conejos comenzó a finales de marzo de este año en las comarcas del Urgell, el Pla d’Urgell, el Segrià, la Segarra, la Noguera y Les Garrigues. Incluyó un total de 91 áreas de caza y 1.889 kilómetros cuadrados.

El regadío ralentiza la siembra de cereal y en secano ya llega al 90%

Los agricultores del Canal d’Urgell tan solo han sembrado entre un 30% y un 40% de sus fincas en zonas de regadío por la sequía a la espera de precipitaciones, una situación que puede cambiar si llueve en el llano. En un año sin sequía ya lo hubieran hecho en el 80% o el 90%, según explicó ayer el responsable de cultivos herbáceos y forrajes de la Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya (FCAC), Santi Vergé. Pese a que la mayor parte del sector está a la espera de que lleguen las precipitaciones para garantizar los cultivos, hacer un cambio y apostar por la cebada a partir del mes de diciembre también es una alternativa para los productores. Vergé explicó que plantar cereal de invierno es para muchos agricultores un “comodín” para asegurarse al menos una cosecha ante la posibilidad de que el próximo verano no dispongan de agua suficiente, como ya ha sucedido en la campaña de este año.Por lo que respecta a las zonas de secano, la época de siembra comienza el 12 de octubre con la llegada de las primeras precipitaciones del otoño. Este año, los payeses han aprovechado la humedad de algunas lluvias para sembrar el 90% de las hectáreas de trigo y algunas de cebada. En algunas zonas el crecimiento de la plantas ya puede observarse, mientras que en zonas más áridas como el Baix Segre, la semilla no se está siguiendo el proceso natural, remarcó Vergé. El hecho de que muchas fincas todavía no están sembradas contribuye a explicar que los conejos arrasen las pocas parcelas que sí lo están.Por su parte, el presidente del Canal d’Urgell, Amadeu Ros, indicó que todavía hay tiempo para sembrar cereal de invierno y que “es relativamente pronto, ya que suele hacerse a partir de mediados de este mes, diciembre e incluso enero”. Al respecto, reseñó que la mayoría están esperando a que se registre alguna precipitación para que el suelo no esté tan seco. Ros indicó que es factible que algunos agricultores puedan comenzar a sembrar e incluso a regar, aunque será a costa de los hidros (la medida de regadío impuesta por la Casa Canal para que todos los partícipes tengan derecho al riego) de la próxima campaña. Por el momento, Rialb y Oliana tienen más reservas en la actualidad que hace un año.

Respaldo de los cazadores y el Segrià y el Urgell, las más afectadas

El 74% de las Áreas privadas de Caza incluidas en la declaración de emergencia cinegética han alcanzado los objetivos fijados para la captura de conejos con un total de 376.373 ejemplares cazados, mientras que el 26% restante han sumado 61.212 capturas. La conselleria considera que se está haciendo un esfuerzo decisivo por parte de la mayoría de las sociedades de caza, aunque no se puede bajar la guardia para controlar la población de este mamífero. El Urgell y el Segrià son las comarcas que han presentado más informes de desperfectos. Se ha contabilizado 1.279 comunicaciones de daños en fincas de 131 payeses.

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