IA: inteligencia aranesa

Dos jóvenes araneses han arrancado una empresa que propone nuevas aplicaciones para la inteligencia artificial en sectores como la construcción y la hostelería. José Solà y David Santana fundaron el mes de octubre pasado Diip Artificial Intelligence y, desde entonces, han estado trabajando en el desarrollo de aplicaciones para dos constructoras de la provincia de Barcelona y para el hotel Val de Ruda, a Naut Aran.

Sus primeros proyectos para el sector de la construcción tienen como objetivo automatizar tareas arduas, rutinarias o simplemente tediosas, como por ejemplo calcular el presupuesto de una obra en función de superficies y materiales, o bien levantar actos de reuniones.

En cambio, en el hotel aranés prueban un asistente virtual que facilite a los clientes hacer pedidos y reservar los servicios que ofrece el establecimiento. En ambos casos, buscan que sea la máquina la que interprete la voluntad de las personas, en ningún sitio que estas tengan que aprender el manejo de un programa informático.

Solana, originaria de Casarilh, y Santana, de Escunhau, fueron compañeros de colegio. Cursaron estudios universitarios en Barcelona, el primero de Ingeniería de Caminos y el segundo de Economía. Su actividad profesional derivó después hacia otros sectores, pero ambos empezaron a tantear las posibilidades que ofrecía la inteligencia artificial en sus respectivas profesiones.

Este interés común les va “Hoy por hoy tiene su domicilio en Barcelona, que está donde ha transcurrido hasta ahora nuestra carrera profesional, pero la posibilidad de trabajar a distancia hace que no descartamos trasladarnos a Arán en el futuro,” explicó Solana.

Un centro para la innovación

De hecho, el Conselh Generau de Arán puso en marcha en el 2020 el centro Hèpic, un espacio de coworking en el municipio de Vielha e Mijaran que pretende favorecer la diversificación económica de la Vale y la implantación de empresas innovadoras.

Asimismo, el valle ha sido los últimos años un banco de pruebas para el desarrollo de tecnologías relacionadas con la ganadería extensiva, las poblaciones rurales y el medio natural en áreas de montaña.

Algunos ejemplos son pruebas piloto de vigilancia de rebaños mediante dispositivos GPS, el despliegue de sensores en ríos para alertar ante avenidas o, más recientemente, las primeras rutas aéreas experimentales para repartir mediante drones medicamentos y artículos ligeros (ved las claves).

Otras iniciativas

La empresa Pirineos Drone prueba una ruta aérea para trasladar paquetes ligeros con drones entre Eth Pònt de Arroz y Arres. Recorrer la carretera de 8 kilómetros llena de curvas entre los dos pueblos requiere unos 20 minutos, delante de los 5 minutos de vuelo. En un plazo de entre 3 y 5 años esperan trasladar paquetes de hasta 5 kg entre estas dos localidades, y más adelante llegar hasta 200 kg. Los fundadores de esta firma viven en Arres de Sus y utilizaron estos aparatos para vigilar ganado de su explotación familiar en Arán.

La empresa de ingeniería Arantec Enginheria, destacó en su día por instalaciones de sensores en ríos de montaña para alertar ante avenidas y reducir el tiempo de respuesta de los servicios de emergencias por evitar daños personales y reducir los materiales. Desde entonces, esta firma con sede en Arán ha desarrollado otras soluciones para medir riesgo de aludes y riesgos geológicos, entre otros ámbitos.

La empresa tecnológica Ixorigue participó en el 2021 en una prueba en Arán de control a distancia de rebaños, que combinó collares con dispositivos GPS para los animales y antenas de radio para dar cobertura en las zonas de pastos sin señal de telefonía móvil.