FAUNA GRANDES DEPREDADORES
Un oso mata 3 ovejas y una cabra a 200 metros de Gessa
Tiró una cerca eléctrica y atacó 2 veces entre el lunes y el martes
Otras dos cabezas de ganado ovino heridas y otra perdida
Un carnero, un macho cabrío y dos ovejas muertas, otras dos heridas y una desaparecida es el balance de un ataque del oso a un rebaño de ovejas y cabras en la Val d’Aran, el primero confirmado esta primavera en el Pirineo leridano. La predación tuvo lugar a tan solo 200 metros del pueblo de Gessa, en Naut Aran y de unos 200 habitantes. La temporada de pastos en alta montaña aún no ha empezado, por lo que los 160 animales que forman el rebaño se encontraban protegidas por un cercado eléctrico cerca de la población.
Eduard Melero, uno de los propietarios del rebaño, aseguró que el plantígrado llevó a cabo hasta dos ataques entre el lunes y el martes, debido a que los cadáveres encontrados hasta ahora estaban a mucha distancia entre ellos. “El domingo por la tarde vi que parte del cercado eléctrico estaba en el suelo y que los animales se sentían muy inquietos e incluso se resistieron a volver a entrar al corral”, explicó Melero, que añadió que “intentas siempre no pensar en lo peor, pero después atas cabos, cuando ya es tarde”. El primero de los animales muertos fue hallado el pasado martes justo al lado del corral, mientras que otro ganadero alertó ese mismo día de otra oveja muerta en pastos de más altitud. Fue entonces cuando Melero alertó a los agentes de Medio Ambiente del Conselh Generau d’Aran. Estos acudieron al lugar de los hechos para certificar el ataque y recoger muestras con las que tratar de identificar al depredador. Los otros dos animales muertos fueron localizados entre el miércoles y ayer por la mañana, y sigue la búsqueda de una oveja desaparecida. En cuanto a los animales heridos, uno requirió atención de un veterinario por un profundo corte. Tras quedar demostrado el ataque, el ganadero explicó que será indemnizado por los daños.
Protestas por la presencia del oso a pocos metros de pueblos
El primer ataque confirmado del oso a un rebaño esta primavera ha sucedido la semana en que ganaderos y payeses de Lleida han protagonizado dos manifestaciones para protestar por la gestión de esta especie en el Pirineo. La primera fue el lunes en Llavorsí, donde unos 70 ganaderos exigieron el “reconocimiento de todos los ataques directos e indirectos” del oso, así como de “los daños colaterales” que supone su presencia en las montañas. La segunda tuvo lugar el martes en Sort, cuando treinta ganaderos con tres tractores cortaron la C-13 para protestar por la “nefasta gestión” del oso.