Vila trasladará al Govern que no puede dar las obras de Sigena

El acuerdo tomado el miércoles por la comisión ejecutiva de la Junta de Museus de Catalunya rechazando la posibilidad de descatalogar las 44 obras de Sigena del Museu de Lleida no es vinculante, pero sí que es el ‘instrumento’ perfecto para que el conseller de Cultura, Santi Vila, demuestre ante la justicia ordinaria que no puede romper la unidad de la colección de la pinacoteca leridana. Así lo trasladará al Govern en el siguiente paso de este litigio judicial, que arrancó el año pasado con una sentencia del juzgado de instrucción número 1 de Huesca por el que se ordenaba la entrega al monasterio de Sigena de cerca de un centenar de piezas adquiridas por la Generalitat en los años 80 y 90 a las monjas del cenobio. Además, el pasado mes de mayo, la titular del juzgado ordenó la ejecución provisional de su sentencia, que ha sido recurrida por la Generalitat ante instancias superiores. El plazo límite para esta ejecución provisional caducó el pasado 25 de julio y ahora se está a la espera de una posible reacción judicial. De hecho, como reveló SEGRE el pasado 1 de septiembre, el Museu de Lleida –con personalidad jurídica propia– tampoco podría autorizar la entrega a Aragón de estas 44 obras al no haber sido demandado por el gobierno aragonés, cosa que solo hizo contra la Generalitat y el MNAC. Se trata de la misma situación en la que se encuentra el obispado de Lleida –miembro del consorcio del Museu–, que no puede entregar las obras que reclama desde hace años Barbastro porque necesitaría el visto bueno del resto de instituciones.

Reñé y Ros aplauden la decisión de la JuntaEl presidente de la Diputación, Joan Reñé, expresó ayer su satisfacción por la decisión de la Junta de Museus de no descatalogar el arte, que constituye “una corroboración técnica” del convencimiento de la sociedad leridana sobre la legitimidad de la colección del Museu. Reñé lamentó la “judicialización” del caso y dijo que “alguien tiene mucho interés en tensionar nuestra sociedad”. Añadió que tanta tensión “está empezando a cargar las tintas”, garantizó que la Diputación hará todo lo posible para que las obras no salgan y dijo que ha hecho gestiones ante el conseller Vila para que se consolide el espacio museístico de Lleida, “también de forma económica”.