ENTREVISTA
Marc Ros: «Cada disco de Sidonie es un reflejo de la música que amamos»
La banda catalana presentará mañana en el Cafè del Teatre de l’Escorxador de Lleida su octavo trabajo discográfico, ‘El peor grupo del mundo’, decididos a hacer sonreir al público que acuda a verles
El último álbum del trío Sidonie se titula El peor grupo del mundo. Es el octavo de su carrera, que este año cumple sus primeros 20 años, y en él se juntan experiencias personales, múltiples influencias musicales y la consolidación demostrada de que su fórmula compositiva e interpretativa es inimitable. Tras 15 años cantando en castellano y un salto del underground al mainstream, ya hace tiempo que disponen de lugar fijo entre los puestos principales del escalafón pop-rock de bandas de nuestro país. El más reciente disco de los barceloneses destila savoir faire y un ramillete de canciones que solo ellos podrían haber firmado. Marc Ros, su cantante y compositor principal, nos habla del disco.
¿Cómo sonarán Sidonie cuando los coches vuelen?
Como siempre, seguirán sonando al pico y a la pala. Escarbando para encontrar el estribillo perfecto. Sabemos que está allí porque otros lo han encontrado.
Aunque falta mucho tiempo ¿se ven trabajando juntos todavía de aquí a veinte años más, como una especie de dinosaurios a la española tipo The Rolling Stones?
Si dentro de 20 años fuéramos como los Stones del 66, firmamos ya. Como eso es bastante difícil y entra en lo cuántico (ni ellos lo han conseguido), nos satisface seguir así los años que hagan falta. Este trabajo nos hace muy felices. Estar en Sidonie es maravilloso.
Aunque a veces no es fácil huir del estancamiento, lo que hoy en día se denomina “zona de confort”, en su caso siempre dan un paso adelante con cada uno de sus discos. ¿Hasta dónde creen que lo han logrado esta vez?
Nunca nos hemos impuesto cambiar en cada disco. Cada disco de Sidonie es un reflejo de la música que amamos. Si, por ejemplo, cuando estamos componiendo estamos escuchando a los Beach Boys seguramente se filtrará algún truco de las grabaciones estupendas de Brian Wilson. En el período en que estábamos grabando Sierra y Canadá escuchábamos a The Human League o a Orchestral Manoeuvres In The Dark y se nota cuando escuchas el disco. Nuestra pasión por el pop es la que guía nuestro pop. Si solo escucháramos a los Stooges todos los discos de Sidonie sonarían a los de Detroit pero como puedes escuchar no es nuestro caso. En EPGDM veo cosas de los Kinks, los Smiths, de Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmám, de los Secretos, de ¡Cindy Lauper!
Nunca han escondido sus influencias, a saber, la psicodelia y el pop sixtie , el folk-rock americano, la new wave de los 80, la electrónica, el brit-pop de las últimas dos décadas o el indie-rock nacional. En El Peor Grupo del Mundo, además, se permiten el lujo de citar algunas de ellas y de llamar a cada cosa por su propio nombre. Incluso hablan bien de sus compañeros de generación, cosa no demasiado habitual por estos pagos. Frank Zappa decía que hablar de música es como bailar de arquitectura.
Pues a nosotros nos encanta bailar de arquitectura y ¡esquiar de literatura! Pasamos tanto tiempo hablando de música que esto se ha convertido en una influencia, en material para hacer canciones. De eso trata El Peor Grupo Del Mundo. Nunca hemos ocultado de dónde vienen nuestras canciones y nos encanta compartirlo con quien quiera escucharnos.
A mí me gusta mucho todo en conjunto, por su esencia básica de colección de canciones pop con mayúsculas y sin material de relleno aparente.
Muchas gracias. A veces pienso que dejas de ser experimental cuando tienes las canciones. Yo creo que en este disco había más canciones que en discos más “aventureros” de Sidonie. Teníamos prisa por grabarlas y dejarnos de artificios. No es que prefiera lo tradicional a la investigación. Me gusta el Rubber Soul de los Beatles porque tiene muchas canciones y algo de búsqueda y al mismo tiempo me gusta el Sgt. Pepper porque tiene mucho de riesgo, menos canciones pero en conjunto es sobrecogedor.
¿Podemos considerar 'Carreteras infinitas', la que da título al disco, y 'Os queremos' la columna vertebral del entramado?
Correcto. Con estas dos empezamos a construir el resto. La primera habla del pop desde el punto de vista del que se dedica a ello y la segunda, desde la mirada del fan.
Ahora que ya llevan suficientes conciertos de presentación para evaluar la respuesta del público ¿qué pueden decir al respecto?
Que vemos a la gente sonreír, esto es lo mejor que nos podía pasar. Cuando nuestro pop pierda la gracia, nos dedicaremos solo a “bailar de arquitectura”.