ENTREVISTA
David Trueba: «Conseguir el dinero es esa parte del cine que nunca te explicaron»
DAVID TRUEBA | escritor y director de cine
El periodista, escritor, guionista y director de cine David Trueba (Madrid, 1969) fue el pasado jueves el protagonista de la clausura de una nueva edición de la Setmana de la Comunicació de la Universitat de Lleida. Guionista de películas como Amo tu cama rica, Two Much o La niña de tus ojos; director de films como La buena vida, Soldados de Salamina o Vivir es fácil con los ojos cerrados; y escritor de novelas como Abierto toda la noche, Cuatro amigos, Saber perder o la recién publicada Tierra de Campos, Trueba explicó al público de la UdL su concepto de la ‘preverdad’ en plena moda de la postverdad.
¿Qué hay antes de la verdad?
Para mí, es la persona. Los profesionales de la comunicación tienen que ser capaces de saber la responsabilidad que tienen a la hora de manejar el concepto de verdad. El público quiere saber la verdad, qué hay de cierto, y solo puede conseguirse con la confianza, el prestigio, la labor bien hecha a lo largo del tiempo, la trayectoria de credibilidad de los profesionales.
Más importante que la verdad es cómo se utiliza.
Sí, por ejemplo, Donald Trump desacredita a los medios para acreditar sus mentiras. Él dice que no es un combate entre una verdad y una mentira sino entre dos verdades. Pero en realidad él cree que se trata de dos mentiras y, por tanto piensa que si los medios os mienten, yo también puedo hacerlo.
¿Las redes sociales son el futuro para comunicar?
Son atajos que no quiero. Cuando escribo una novela, busco lectores que quieran leerme, sentarse unos días con mi historia y mis personajes, compartiéndolos, disfrutándolos en la intimidad. Y estos lectores no los voy a encontrar en estos atajos. Además, hay que saber manejar muy bien las redes sociales. Somo muy nuevos en estos caminos. Puede descontrolarse todo. Es como el que coge un coche sin saber conducir.
Unas redes que se incendiaron contra la ‘falta de patriotismo’ de su hermano Fernando.
Sí, hoy es Fernando Trueba y mañana puede ser otro. Se trata de destruir la posibilidad de que uno tenga unos sentimientos o unas opiniones diferentes a los tuyos. Son campañas que por desgracia ya vivimos antes con los productos catalanes. Y lo que me parece más grave no son los que incitan al boicot sino la pasividad del resto para darse cuenta de que estamos pervirtiendo a la sociedad.
¿Cómo ve el proceso independentista en Catalunya?
Con cierta preocupación porque tengo una posición emocional muy cercana con Catalunya, donde vivo durante temporadas adonde viajo constantemente, sobre todo a Barcelona. Siempre he sido muy ajeno a las guerras de banderas, estoy más interesado en las personas y creo que se está fugando una gran cantidad de energía creativa hacia un territorio político simbólico en el que los extremos van ganando y hay que decidir por uno u otro. Las personas somos juguetes en estos equilibrios. Me resisto a ello. Mi batalla es intentar escribir una buena novela o rodar una buena película.
¿Su nueva novela, ‘Tierra de Campos’, es un viaje nostálgico?
No, no, qué va. Soy la persona menos nostálgica del mundo. Cuento 45 años de la vida de un cantante, que va recordando cosas que le han pasado. Y como siempre en lo que escribo, hay mucha pincelada autobiográfica pero no por un deseo exhibicionista sino porque creo que uno habla siempre mejor de aquello que conoce o ha vivido.
¿Le supo mal que Javier Cercas aireara en su última novela su ruptura con su pareja, Ariadna Gil?
No me he enfadado en absoluto. Él hace sus ejercicios novelísticos y lo hace muy bien. Nunca he sido una persona censora por naturaleza. Y si Cercas me introduce en una historia en la que yo puedo aportarle algo, pues bien está.
¿Volverá pronto al cine?
Tengo ganas de volver a coger la cámara. Tengo un proyecto que ha estado cerca de financiarse, pero aún no. La producción es esa pata de la profesión que nunca te explicaron: tienes que ser capaz de conseguir dinero.