PATRIMONIO
El Morera celebra su centenario con la vista en la nueva sede
“Cien años en un museo hacen volar porque un museo es la expresión más perfecta de una sociedad que ama la cultura”. Con estas palabras, Jusèp Boya, el director general de Patrimonio de la Generalitat, ensalzaba este jueves el Museu Morera de Lleida durante la presentación del libro El Museu d’Art Jaume Morera. 100 esdeveniments que han marcat la seva història (Pagès Ed.) en el salón de plenos de la Paeria. Obra de los historiadores Jesús Navarro (director del equipamiento) y Esther Solé, conmemora el centenario de la pinacoteca, que se cumplió el pasado 11 de mayo, coincidiendo con las Festes de Maig. En este sentido, Boya recordó que el Morera cuenta “con una de las colecciones de más proyección nacional”.
El volumen, profusamente ilustrado tanto con obras de su fondo como con imágenes históricas, repasa la historia del equipamiento haciendo hincapié en cien acontecimientos relevantes de su trayectoria, lo que implica que pueda leerse, en palabras de Vidal Vidal, director de la colección La Gramalla, “como una novela, porque se puede seguir como la aventura de un museo que empezó en un antiguo hospital para acabar en una antigua audiencia”.
Y es que la futura adecuación de la antigua Audiencia como sede definitiva de lo que será el Museu d’Art de Lleida, 100 años después de su inauguración, estuvo muy presente durante todo el acto. De hecho, el alcalde, Àngel Ros, recordó que en el próximo pleno (el 26 de mayo) se aprobará el proyecto de adecuación y en junio se iniciará la licitación. La editora Eulàlia Pagès celebró que la presentación coincidiese con el Dia dels Museus porque el Morera “ha sido un testimonio privilegiado del paso del tiempo y del crecimiento de la ciudad de Lleida”.
Durante el acto, Solé repasó la historia del museo desde sus orígenes con la Exposició General d’Art de 1912 hasta los años 80, haciendo especial hincapié en las diferentes sedes por las que se ha visto obligado a peregrinar el centro. Le tomó el relevo Navarro, que se centró en la última etapa y en la renovación de la institución desde la llegada de la democracia hasta la actualidad.
En este sentido, aprovechó para recordar “la importancia de este momento centenario para lograr un edificio a la altura de lo que se merece”. También deseó que sea “un proyecto asumido por la ciudad y un elemento necesario para completar la visión de la historia de nuestro arte”.