PATRIMONIO REHABILITACIÓN
La iglesia de Butsènit, icono del barroco
El ayuntamiento de Montgai trabaja en el proyecto de convertir la iglesia del núcleo de Butsènit d’Urgell en un centro de referencia del barroco del siglo XVIII tanto a nivel turístico como patrimonial tras la inesperada aparición de pinturas murales de este período el pasado abril. El alcalde de la población, Jaume Gilabert, destacó que “en el territorio se han conservado pocas pinturas de estas características, hecho que les da valor añadido”. A medianos del próximo mes de octubre está previsto que el templo religioso reabra de nuevo al culto después de la actuación de repintado del interior, iniciado en abril y que se ha retrasado tras la aparición de estas pinturas murales, que simulan unos retablos, de alto valor artístico y patrimonial. El alcalde explicó que la iglesia reabrirá a la espera de poder llevar a cabo la restauración de las pinturas en 2018, trabajo que ejecutará el Centre de Restauració de Béns Mobles Catalunya de la Generalitat (CRBMC). Gilabert dijo que “por el momento las capillas quedarán a la espera de la intervención de los restauradores”. Las pinturas que ya lucen en su forma definitiva son las que aparecieron en el techo de la iglesia. Según Gilabert, “se trata de pinturas decorativas barrocas, con menos importancia que las de las capillas, pero que forman parte de la idiosincrasia de la iglesia de la época”.
Cabe recordar que el pasado mes de abril la parroquia decidió repintar el templo una vez terminadas las obras de restauración del tejado ya que estaba lleno de goteras y presentaba humedades. Para la sorpresa de todos, cuando los pintores empezaron a sanear las paredes, salieron a la luz estas pinturas murales. En una de ellas incluso se puede ver la fecha de finalización de la obra, 1761, cinco años después de la consagración del templo religioso. Fue entonces cuando el consistorio leridano se puso en contacto con el CRBMC y un equipo de sus técnicos se desplazó hasta Butsènit para evaluar in situ el descubrimiento. Según Gilabert, “los expertos aseguraron que se trata de pinturas de alto valor histórico”. Actualmente, en toda Catalunya se conocen pocas pinturas similares. De momento, se conocen solo unas en la iglesia de Navata, en el Empordà, y otras en Paüls en La Vall Fosca (ver desglose).
Una práctica habitual en el siglo XVIII, por lo que podría haber más Gilabert explicó que en el siglo XVIII era una práctica habitual decorar templos con pinturas murales al fresco teniendo en cuenta que había una crisis económica importante y no se podían hacer retablos. Muchos recorrieron a esta técnica pero con los años y la mejora económica, se construyeron retablos que en muchos casos taparon y sustituyeron estos murales. Es por ello que, según algunos expertos, no sería de extrañar que en caso de estudiarlo, se encontrasen más pinturas de estas características en otras iglesias de Lleida y Catalunya.