Sarandon defiende las historias “como guardianes de sueños”

La actriz estadounidense Susan Sarandon aseguró ayer que ante un mundo que parece que se esté desmoronando, “las historias son importantes” porque explican cómo son los seres humanos, y llamó al sector del cine a mantenerse fuerte en ese objetivo. En un encuentro con el público en el Sitges-Festival Internacional de Cine Fantástico de Catalunya, con fuerte presencia de actrices, definió a los representantes del sector como “los guardianes de los sueños” y les pidió que se mantengan fuertes para hacer películas. Susan Sarandon, que recibió el Gran Premio Honorífico del festival, defendió el trabajo de la actuación y dijo que es del tipo de empleo que “se hace porque se quiere hacer y duele cuando no se hace”. Asimismo, lamentó que en ocasiones el aspecto económico está en tensión con el vocacional. La actriz aseguró que Hollywood “va con piloto automático” en la política de género en sus producciones y no ve intención de cambiar, pero que ahora las diferentes plataformas existentes permiten visualizar historias que en otros ámbitos no se verían. Para ella, el Hollywood actual está compuesto por ‘matemáticos’ que solo buscan la rentabilidad de sus inversiones y tienen “poco que ver con el arte”, pero pidió que se mantenga la fe en los creadores. También señaló que le gusta actuar en el teatro, pero cada vez menos en Broadway, ya que prefiere obras más pequeñas. Además, afirmó que cuando recibe un guión lo primero que intenta para encarnar el papel es buscar puntos de contacto con el personaje, y que luego busca que sea un texto “eficiente en todas sus partes”, evitando que sea redundante y ayude a la trama.

Por otra parte, el director Jaume Balagueró estrenó en el festival de Sitges su nueva película. Muse, que se proyectó fuera de concurso, narra la historia de un profesor de Dublín que ve cómo su pareja se suicida y que, un año después, comienza a tener pesadillas relacionadas con un enigmático culto que tiene la poesía y la creencia en las musas como hilo conductor. El director quiso reconocer el trabajo de dos de sus actrices protagonistas cuando dijo: “Yo tengo dos musas y las tengo a mi lado”, en referencia a Franka Potente y Manuela Vellés. Y añadió: “Las musas existen, están alrededor de uno, uno crea inspirándose en lo que ve, siente, huele, todo eso son musas; y la película es una metáfora sobre el proceso de creación, que a veces puede ser aterrador”. La película se basa en La dama número 13, de José Carlos Somoza, aunque Balagueró explicó que ha reducido el número de musas para que no quedaran desdibujadas.