PATRIMONIO GESTIÓN
El año decisivo de la Seu Vella
Joan Reguant, artífice del éxito de las Fallas, dirigirá a partir de hoy la candidatura a Patrimonio Mundial de la antigua catedral de Lleida || En otoño de 2018 debe presentarse el proyecto definitivo
En otoño de 2018 la candidatura del Turó de la Seu Vella a Patrimonio de la Humanidad quedará vista para sentencia. O, por lo menos, se pasará otra decisiva pantalla. Para hacer frente a este nuevo reto el consorcio que gestiona el monumento más emblemático de Lleida ha fichado a todo un experto en Unesco, Joan Reguant, artífice del éxito de la candidatura de las Fallas del Pirineo como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Reguant dirigirá desde hoy la candidatura de Lleida, después de trabajar más de un año como asesor del proyecto. Así lo anuncio ayer el alcalde de Lleida, Àngel Ros. Antoni Llevot, asesor en temas culturales de la Paeria, explicó ayer que la incorporación de “alguien del perfil de Reguant” a la candidatura “era necesaria” porque los requisitos de la Unesco son “muy específicos” y hay que afinar al máximo, sobre todo después de haber conseguido estar en la llamada “lista indicativa” del Estado español, que selecciona tan solo cuatro proyectos cada año. El dosier con el que trabajaba Lleida hasta ahora debe implementarse con las observaciones que el “informe del experto” de la Unesco aportó cuando la Seu Vella pasó a formar parte en 2015 de la lista indicativa. “Se ha trabajado mucho y muy bien, pero aún nos queda un largo camino por recorrer”, por lo que Reguant se reunirá hoy con el comité científico que asesora al Consorci del Turó para empezar a trabajar. “La próxima primavera tenemos que volver a explicar quiénes somos y cómo queremos enfocar nuestra candidatura y en otoño ya hay que presentar el informe definitivo”, dijo Joan Baigol, director del Turó. No se atreve a hablar de “puntos fuertes ni de puntos débiles”, pero sí que explica que “hay quue reorientar algunas cosas”. El estado de conservación de las murallas, talón de Aquiles del monumento, es una de las preocupaciones. De ahí que este año ya se hayan hecho cuatro intervenciones, de las que tres han sido de urgencia. Pero no solo cuenta el estado de conservación y, en este sentido “estamos muy contentos con la buena respuesta del público a todas las actividades que organizamos”. Además, la candidatura de la Seu Vella pretende poner en valor un paisaje urbano en el que hasta el vacío, fruto de la militarización de la antigua catedral, es historia.
Gran conocedor de los mecanismos que rigen la Unesco Joan Reguant es presidente del Comité Nacional andorrano del Icomos. Ha sido coordinador, consultor y redactor de varias candidaturas del Patrimonio Mundial y del Patrimonio Cultural Inmaterial, entre ellas la de las Fallas, que obtuvo el reconocimiento en 2016, asío como la del paisaje del Priorat, que está en la lista indicativa, como la Seu Vella. Ha ejercido de experto en el órgano subsidiario de evaluación de candidaturas entre 2011 y 2013, miembro del consejo asesor del Patrimonio Cultural de Andorra (2009-2014), además de autor de libros sobre patrimonio y paisaje.