CULTURA
«Me encanta l
Carles Morell (Artés, Bages, 1992), graduado en Filología Catalana, autor de varios poemarios y colaborador en revistas y medios especializados, ganó el viernes el 22 premio de poesía Màrius Torres con la obra Disponibilitat.
El título deja entrever su especial interés en la poesía por la forma de las palabras.
La forma es importante en cualquier manifestación artística, no solo en la poesía. En mi caso, la musicalidad de la palabra en la poesía es esencial e irrenunciable. El poema tiene que llevar necesariamente esta carga de musicalidad.
¿Cómo elabora el poema?
En la mayoría de las veces se me impone un determinado ritmo después de haber digerido muchas cosas. Este ritmo me llega, se me manifiesta en la mente, y coloco las palabras que tengan sentido y le vayan bien. En el proceso de reescritura de este material es cuando acabo de afinar, de maquillar, de modificar todos los componentes que acabarán conformando el poema.
¿Qué es para usted la poesía?
Es un conjunto de textos, un legado, y un conjunto de textos posibles, aún por hacer, que se podrán escribir gracias a los que ya se han escrito. Es legado y tradición en el sentido de las lecturas que tenga cada uno y, a partir de aquí, un diálogo con la alteridad, con cualquier autor que te haya precedido.
¿Y la función de la poesía?
Contribuir a la vida pequeña, atender las necesidades de un hombre corriente en una época concreta a través de la aceleración de la conciencia, la que nos ofrecen estos autores que nos han precedido y que ya han pensado el mundo.
¿Cómo vive un amante de la palabra el mundo del
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hatsapp
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El problema no es este lenguaje simplificador sino la falta de conocimiento, de interés, de promoción cultural. Hay un problema educativo de raíz, porque la cultura hace aguas a muchos niveles. En una librería, lo que más interesa son las novedades, que al cabo de unas semanas o de un mes ya no están. Aquí no hay cultura ni nada en absoluto.
¿Hay más público en los recitales que lectores de poesía?
Hay gente que va a los recitales y se piensa que aquello ya es poesía. La poesía de verdad, la gran poesía, necesita ser escuchada pero también necesita ser leída y releída. Sin este segundo momento, nos quedamos cojos.
¿Qué significa para usted ganar un premio que lleva el nombre de Màrius Torres?
Siempre he celebrado la poesía de Màrius Torres, un autor de cabecera, para nada desconocido, que ha entrado en el canon académico, y en el popular como mínimo en Lleida. Y una de las cosas que más me ha sorprendido y gustado muchísimo también es su prosa.