Solo han reclamado en Catalunya
Hay obras del monasterio en el Museo del Prado, el de Santa Cruz de Toledo, Zaragoza y Cleveland
Todo el arte del monasterio de Sigena no estaba en el Museu de Lleida o el MNAC, aunque la beligerancia del gobierno de Aragón y del ayuntamiento de Villanueva de Sigena se circunscribe, al menos de momento, solo a Catalunya. No ha llegado en cambio al Museo del Prado de Madrid, el de Santa Cruz de Toledo o los museos de arte de Zaragoza y de Huesca y hasta en Cleveland (Estados Unidos), que también cuentan con obras del monasterio oscense. El caso más ‘curioso’ es el de la tabla de la Nativitat, del retablo mayor de Sigena, de principios del siglo XVI, adquirida en subasta por el ministerio de Cultura y depositada desde 2003 en el Museo del Prado. A diferencia de la compra de la Generalitat a las monjas del cenobio, declarada ilegal por un juzgado de Huesca, la adquisición del Estado no ha sido denunciada desde la administración aragonesa. En Toledo, el Museu de Santa Cruz exhibe otro fragmento del rico retablo mayor de Sigena, vendido a trozos a finales del XIX. Se trata del dedicado a la Presentación dela Virgen en el Templo. Por su parte, el Museo de Zaragoza dispone de dos tablas de este mismo retablo y también una caja sepulcral, mientras que el de Huesca conserva 4 tablas y otros compartimentos del retablo de San Juan Bautista. Por otra parte, también cabe preguntarse sobre si Aragón debe hacer frente a los costes de conservación del arte. En este sentido, tras un peritaje económico, el Museu añadió en su demanda un informe por el que la reclamación ascendía a 360.000 euros por los gastos generados por diversos conceptos, desde operaciones de restauración hasta la misma conservación de las piezas (la parte correspondiente a facturas de luz o agua del edificio) o la difusión en publicaciones, entre otros.